Enviar mensajes de texto o hablar por teléfono aumenta cuatro veces el riesgo de chocar

Enviar mensajes de texto o hablar por teléfono aumenta cuatro veces el riesgo de chocar y sufrir lesiones. El sistema manos libres tampoco es recomendable, ni para los que conducen ni para los peatones. Desde la Dirección General de Defensa Civil del Gobierno de la Ciudad nos sumamos a las campañas de prevención en esta temática.

Cada vez pasamos más tiempo con el celular en la mano.
El mayor problema radica en que no lo dejamos ni para manejar, ni para cruzar la calle, ni para hacer cosas que requieren nuestra atención exclusiva. Y en las que una distracción puede pagarse caro.
Parece que asistimos a una nueva moda de mandar mensajes mientras manejamos, mientras caminamos por la calle, mientras cruzamos. Parece que no entendiéramos el peligro al que nos exponemos a cada paso.
Las distracciones son una de las principales causas que ocasionan la muerte de 22 personas por día en accidentes del tránsito en la Argentina. Enviar mensajes de texto o hablar por teléfono aumenta cuatro veces el riesgo de chocar y sufrir lesiones.

Cuando manejamos, las alteraciones al usar el teléfono celular pueden ser equivalente a las de manejar alcoholizado según explican los especialistas.
Para la Organización Mundial de la Salud “los conductores que usan un teléfono móvil pueden tener: un tiempo de reacción más lento (en particular, el tiempo de reacción para frenar, pero también la reacción frente a las señales de tránsito), una capacidad limitada de mantenerse en el carril correcto y una distancia menor con el vehículo que va delante”.
El dispositivo de ´manos libres´, si bien no afecta la maniobrabilidad tampoco resulta seguro ya que varias investigaciones demuestran que produce un peligroso aumento en los tiempos de reacción.
En el caso de los peatones la situación es de igual modo preocupante. La altísima vulnerabilidad que padecemos cuando caminamos debería obligarnos a encender la luz de de alerta.
Según un informe de la Defensoría del Pueblo de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, los que circulan a pie representan el 45% de las víctimas fatales, muy por delante de los motociclistas (29%), y los automovilistas (19%).
Caminar distraído se enmarca entre los principales riesgos para los peatones, sumado al aumento de posibilidad de sufrir lesiones graves o morir dada la falta de elementos de protección mientras se transita.
Si bien todos creemos que `a nosotros no nos va a pasar` y algunos van a discutir su capacidad para prestar atención a varias cosas a la vez, o para hablar y manejar al mismo tiempo o de escuchar música y mirar el semáforo en simultáneo, las cifras son elocuentes.
Es obvio que los incidentes de tránsito están ligados a estas distracciones y lo sabemos.
¿Por qué nos cuesta tanto entonces dejar de responder el celular de inmediato?
¿Qué diferencia habría si nos tomarámos 2 minutos y nos detuviéramos tranquilos a contestar o a hacer ese llamado que “no puede esperar”?

Fuente: Organización Mundial de la Salud /Uso del celular al volante: Un problema creciente de distracción del conductor.