El servicio inicia a las 5.30 y termina a las 23.30 de lunes a viernes. Mientras que los sábados será de 6 a 24 horas y los domingos se mantiene el esquema actual: de 8 a 22 horas.
A partir de este lunes, el subte empieza y termina media hora más tarde, modificación que, según el gobierno de la ciudad, beneficia a unas 140.000 personas. Por su parte, los metrodelegados insisten en que el corrimiento del horario «deja a pie a miles de usuarios». En las seis líneas, el primer servicio empezará media hora más tarde de lo habitual, es decir, 5.30, mientras que el último termina media después, a las 23.30.
Los sábados el horario se correrá una hora, de 6 a 24. Domingos y feriados, en tanto, se mantiene el esquema actual: de 8 a 22. Esto, según el gobierno porteño -a cargo de la iniciativa- perjudica a alrededor de 2.000 usuarios pero beneficia a 140.000. Desde el gobierno comandado por Horacio Rodríguez Larreta dijeron que al analizar los flujos de pasajeros detectaron que durante los días de semana hay muy pocos usuarios de 5 a 5.30 (menos de 2.200) y lo mismo sucede los sábados entre las 5 y las 6.
Por otro lado, se advirtió que la demanda crece luego de las 22. «Es mucha más la gente que gana, que va a poder viajar en subte a la noche, que la que deja de viajar a la mañana», dijo el jefe comunal. Respecto de extender el cronograma hasta la 1, Rodríguez Larreta habló de imposibilidad: «La franja actual entre el inicio y cierre del servicio se necesita para hacer obras. Si no podemos contar con esas seis horas a la noche para trabajar, no se puede modernizar el subte».
Este cambio acrecienta la puja entre la ciudad y la Asociación Gremial de Trabajadores del Subterráneo y Premetro, para quienes es posible que «no se pueda brindar en forma correcta el servicio».
«Usuarios a pie»
El gremio llamó a la «reflexión» al gobierno al advertir además que la medida «no sólo no resuelve el problema del transporte público en la ciudad, sino que deja a pie a miles de usuarios todos los días entre las 5.00 y las 5.30». Los trabajadores sustentaron la advertencia en «el alto grado de improvisación con que se encaró esta modificación, sumado a cuestiones técnicas y operativas que no fueron contempladas», y reclamaron que, en vez de «correr» el horario del servicio, se realice una «extensión horaria».
Por su parte, la empresa Metrovías considera que «una extensión del horario puede ser analizada y considerada para el futuro sin que por ello se vea afectada la implementación de este corrimiento que comenzará a regir a partir del lunes».
