A partir del miércoles subirá 26 por ciento el agua residencial

Este incremento afectará a uno 3,5 millones de usuarios, quienes pagarán el 26 por ciento más por el servicio, mientras que de ese número, 1,1 millón de la categoría residencial recibirá una suba mayor, puesto que estará afectado por la quita de 6,25 por ciento de subsidios en cada bimestre.

Se trata del aumento que propuso la compañía estatal durante la audiencia pública del pasada 15 marzo, en la que precisó que la quita del subsidio a lo largo del año llegará al 30 por ciento de los usuarios residenciales, por lo se terminará encareciendo la tarifa en hasta 68 por ciento a lo largo del 2018.

A partir del miércoles subirá 26 por ciento. Esto se suma a otros incrementos que ya se produjeron en los primeros meses del año como los de transporte y luz, entre otros. Según la empresa estatal AySA, que brinda el servicio en la zona metropolitana, la tarifa promedio de un usuario residencial será de 208 pesos por mes y por servicio, mientras que la mínima va a ser de 130 pesos.

Además, propuso aplicar gradualmente el ajuste en la tarifa, que según una disposición de 2017, debería concretarse de una sola vez desde mayo.

También, según números de la propia empresa, este recorte de subsidios representarían unos 200 millones de pesos, es decir el 1,25 por ciento de la recaudación de la empresa.

El 15% de la población argentina no tiene acceso al agua potable, el 40% vive sin cloacas y apenas el 20% de las aguas residuales cuenta con un tratamiento en el país. Según el Censo 2010, 83.9% de los argentinos usaban la red pública como fuente principal de agua para beber y cocinar. 14.8% usaban agua de perforaciones o pozos, mientras que un 1.3% tenían como fuente principal de agua para beber y cocinar la colecta de agua de lluvia, carro-cisternas, ríos, canales o arroyos. Los detalles se muestran en la tabla siguiente: ​En cuanto a la expansión de servicios efectuada por la empresa estatal Aysa, más de $16.000 millones invertidos; más de 600 obras ejecutadas; más de 2.500.000 usuarios incorporados al servicio de agua potable y 1.800.000 al de cloacas entre 2006-2013″.

En general, el servicio es continuo y el agua es de calidad potable en las zonas urbanas ​

Calidad del agua La calidad del agua potabilizada suministrada es considerada adecuada en términos generales para el uso doméstico e industrial, estimándose que más del 90 % de la población nacional recibe agua potable de acuerdo con los estándares de salud pública.

En algunas de las ciudades más representativas, en el 2005 el nivel de ejecución de controles de agua potable respecto de las normas era superior al 100%, mientras que la conformidad con los parámetros establecidos varía entre un 93 y un 100%.

Continuidad y presión En la mayoría de las ciudades, la continuidad del servicio de agua potable en las áreas urbanas es del 100 %. Sin embargo, en algunas ciudades del interior con un clima seco los racionamientos de agua en los meses de verano son un suceso frecuente. Aún en las ciudades con servicio continuo, muchos usuarios reciben agua con presión menor que el prescripto en las normas. Por ejemplo, en Buenos Aires solamente 32% de los usuarios recibieron agua con una presión de más de 10 metros de columna de agua en 2004.

Uso de agua y pérdidas El promedio nacional de producción de agua por habitante servido se estima en 380 L/hab/día. El consumo medio real sobre la base de los resultados de sectores que operan con micromedición es del orden de los 180 L/hab/día. Las pérdidas en las etapas de producción y distribución de agua son del orden del 40 % del total producido.