Agosto a dos puntas: CGT en diálogo y conflictividad creciente

En un contexto donde predomina la “estrategia de la prudencia” en la CGT reunificada, preocupada por mantener la interlocución con el Gobierno, y centralizar el canal de dialogo. se manifiesta una creciente conflictividad en el mundo laboral y social.

Conflictividad Laboral

El informe de Conflictividad Laboral del mes de agosto da cuenta de un fuerte incremento de la cantidad de conflictos, en un 77%, respecto de julio. Los conflictos laborales del sector público tienen un aumento del 212% (la mitad explicados por conflictividad en el orden provincial), mientras que los conflictos del sector privado aumentaron un 10,6%.

Casi el 75% de las causas de la protesta en el sector público estuvo relacionado con reapertura de paritarias y cuestión salarial en general, seguidos en 10,7% por condiciones de trabajo y 9,7% por conflictos por despidos. Al interior de los reclamos salariales, aproximadamente el 80% son exigencias de reapertura de paritaria, y sólo el 15% atraso en el pago de salarios. En la metodología de protesta fue predominante el paro, con y sin movilización, que representó el 65% de los conflictos. Luego, la movilización representó el 21%.

Respecto de los conflictos de los trabajadores con empresas del sector privado, el relevamiento durante el mes de agosto mostró que los conflictos se incrementaron un 10% respecto al mes anterior. La mayor proporción la explican los conflictos en la industria, con el 36% del total. Con situación similar a junio, las dos causas centrales de conflictividad laboral respondieron a despidos y suspensiones (cerca del 40%) y reclamos salariales (34%), en este orden.

Al observar los conflictos por despidos, vemos que el 32% de los conflictos se produjeron en el sector industrial, el 28% de los conflictos por despidos fueron en el sector minero y energético y el 17% de los conflictos por despidos se produjeron en empresas comerciales.

Al analizar la metodología de la protesta en el sector privado se observa que el 36% de los conflictos tuvieron el corte de ruta o la imposibilidad de acceso a la planta como modalidad distintiva reclamo, mientras que el 34% corresponde al paro (con o sin movilización). Finalmente, el 23,6% se explica por movilizaciones y concentraciones.

Al observar la distribución geográfica, vemos que la mayor cantidad de conflictos labores se produjeron en la provincia de Buenos Aires (21% del total), y a esta provincia le sigue la Ciudad autónoma de Buenos Aires, con el 12,5% y luego las provincias patagónicas de Neuquén, Santa Cruz, Chubut y Río Negro, las cuales representan en total el 26, 1% de los conflictos, motorizados por los trabajadores Estatales y los petroleros.

Conflictividad social

Asimismo, sobre el total de conflictos en agosto (que ascendieron a 246), un 28,4% (70 conflictos) fueron específicamente sociales o no laborales, protagonizados por los Ruidazos, la Marcha por San Cayetano, las protestas de los productores regionales y las marchas en defensa de los DDHH y cuestiones de género. En este tipo se observa que la mayor concentración se alcanza en CABA (35,7%) y en menor medida (28,6%) en la zona Centro o Pampeana.

En relación a las acciones de protesta resultaron en un 80% de forma organizada, demostrando un alto índice de organización política y elaboración de estrategias de acción. Las convocatorias son llevadas a cabo mayoritariamente por Organizaciones Sociales. El 20% restante que se manifiesta de manera espontánea son actores sociales autoconvocados, comerciantes, vecinos y familiares. Esta modalidad de acción se expresó más fuertemente en la CABA y en la provincia de Santa Fe.

UN 28,6% de las protestas sociales se enmarcan en reclamos en contra del ajuste y los tarifazos, y un 20% en protestas por falta de trabajo, seguidas en un 14% por justicia y derechos humanos.