Tras la desastrosa vacunación de los adultos mayores el último martes en el Luna Park y el estadio de San Lorenzo, y en el medio del pedido del bloque del Frente de Todos por interpelar al ministro de Salud porteño Fernán Quirós, para que dé explicaciones sobre los hechos, hablamos desde la ACMV con el auditor de la Ciudad, Lisandro Teszkiewicz.
Los legisladores del Frente de Todos intentarán que el ministro Quirós brinde información sobre las circunstancias ocurridas el pasado martes, además de cuáles fueron los criterios utilizados para la distribución y aplicación de las vacunas por parte de las Prepagos y Obras Sociales arbitrariamente elegidas.
“Las escenas que vimos el martes están entre lo indignante y lo grave: indignante porque hay una falta de dignidad y maltrato de nuestros adultos mayores en la Ciudad de Buenos Aires, y grave porque generaron un riesgo médico, y más aún con las experiencias que ya habíamos tenido con los bancos”, comenta Teszkiewicz.
Tras la desorganización en la vacunación de los adultos mayores, Fernán Quirós dice: “Subestimamos la cantidad de personas que iban acompañadas”. Por tal motivo, Lisandro, respondió: “(Lo de Quirós) fueron excusas pueriles: le echó la culpa a los beneficiados y demuestran el profundo desprecio por la gestión pública. El gobierno de la Ciudad solo sabe la gestión de lo privado y eso fue lo que hicieron con la Salud, con las prepagas para que gestionaran la vacunación y que generó ciudadanos de primera y ciudadanos de segunda. Quienes tienen acceso a las prepagas, se vacunan, y quienes no, tienen que ir a hacer colas interminables y exponerse a un riesgo”.
Sin embargo, lo del martes negro (por suerte) no se repitió el miércoles y el orden de vacunación alcanzó un mayor nivel de respeto y acompañó los protocolos sanitarios que la pandemia por coronavirus exige para no expandir la enfermedad aún más. “Es verdad que al día siguiente mejoró el Plan de Vacunación, pero ¿no lo sabían? ¿No sabían que estaban dando muchos turnos? ¿No saben que hay un sistema de descentralización que se llama Comunas y se podrían haber evitado la afluencia masiva de personas en distintos centros de vacunación? Y otra cosa: ¿Por qué contaron al Luna Park y a San Lorenzo?”, se pregunta el auditor de la Ciudad de Buenos Aires.
A diferencia de la Provincia de Buenos Aires que utilizó establecimientos públicos para el Plan de Vacunación, la Ciudad optó por lugares privados y nadie entiende el porqué. “No lo sé. No sé si el Luna Park y San Lorenzo se ofrecieron voluntariamente o hubo un canon. Lo que sí sé es que fueron centros privados y desprecian la gestión pública. Lo que pasó el martes desnuda la gestión de Larreta en la Ciudad”, reflexiona.
Ante los pedidos de justicia por lo ocurrido el martes, Lisandro aclaró que el informe recién estará para el año que viene. “Todavía no tenemos a los profesionales del sistema de Salud público vacunados, y tampoco tenemos un registro de los vacunados en general, y esto se da porque las auditorías son a año vencido. Entonces, lo que pasó este año, recién se va a saber en 2022”, cierra Teszkiewicz.
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