Bolsonaro y un inesperado giro para la relación entre Brasil y la Argentina.

El triunfo electoral de Jair Bolsonaro puede derivar en un inesperado giro para la relación entre Brasil y la Argentina. Ganó Bolsonaro y la policía festejó con un desfile por las calles de Brasil. Con la victoria de Bolsonaro en las elecciones de Brasil, llegó un festejo inusual: policías desfilaron por las calles entre cantos y arengas de apoyo al nuevo mandatario.

Con ese marco, las declaraciones de Paulo Guedes, sindicado como futuro ministro de Economía de Bolsonaro, parecen confirmalo. Guedes criticó duramente al Mercosur y aseguró que el bloque regional es una cuestión «ideológica» y no será -tanto como la Argentina- una prioridad para el próximo gobierno brasileño.


Sobre los homosexuales

«Los homosexuales lo son por consumo de drogas, solo una pequeña parte lo es por defecto de fábrica»

«No voy a combatir ni a discriminar, pero si veo a dos hombres besándose en la calle, les voy a pegar»

«Sería incapaz de amar a un hijo homosexual. No voy a responder como un hipócrita, ante eso, prefiero que un hijo mío muera en un accidente»

Sobre las mujeres

«Ella no merece ser violada, porque ella es muy mala, porque ella es muy fea, no es de mi gusto, jamás la violaría»

«No es una cuestión de colocar cuotas de mujeres porque sí. Tenemos que colocar gente capacitada. Si colocan mujeres porque sí, voy a tener que contratar negros también».

«Tengo cinco hijos: fueron cuatro hombres, ahí en el quinto me dio una debilidad y vino una mujer»

Sobre su ideología
«El error de la dictadura fue torturar y no matar»

«Hay que dar seis horas para que los delincuentes se entreguen. Si no, se ametralla el barrio pobre desde el aire»

Racismo
«No corro el riesgo de que uno de mis hijos se enamore de una mujer negra porque fueron muy bien educados»

«No hacen nada (las comunidades negras). Más de mil millones de dólares al año estamos gastando en ellos. No sirven ni para procrear»

La Argentina también tuvo espacio en su primeras declaraciones. Así las cosas, y consultado por la prensa sobre si Brasil dejaría el Mercosur, también integrado por Paraguay y Uruguay, respondió: «No vamos a romper ninguna relación. ¿Si voy a comerciar sólo con la Argentina? No. ¿Voy a comerciar sólo con Venezuela, Bolivia y la Argentina? No; vamos a negociar con el mundo. Serán más países. No seremos prisioneros de relaciones ideológicas. Haremos comercio».

Finalmente, dijo con tono molesto ante la insistencia de los periodistas: «El foco del programa (económico) es el control de gastos. Y usted me pregunta por el Mercosur.No es prioridad. La prioridad no es el Mercosur; el Mercosur no es prioridad. No, no. ¿Eso es lo que quería oír? Es un estilo que combina con el del presidente; hablamos la verdad. No estamos preocupados en agradarle».

El presidente Mauricio Macri felicitó al flamante mandatario electo de Brasil, Jair Bolsonaro, y deseó que trabajen «pronto juntos por la relación entre ambos países».

El mandatario argentino utilizó su cuenta de Twitter para enviarle su saludo al triunfante candidato del Partido Social Liberal (PSL) quien será el sucesor de Michel Temer al frente del Palacio del Planalto.

«¡Felicitaciones a Jair Bolsonaro por el triunfo en Brasil! Deseo que trabajemos pronto juntos por la relación entre nuestros países y el bienestar de argentinos y brasileros», expresó el líder del PRO.

Sin embargo, en la Casa Rosada saben que deben ser cautos y medidos. De hecho, la incertidumbre y las dudas que genera la presidencia de Bolsonaro en la Argentina son algo inocultable.

Desde el senio mismo de la Administración macrista siempre buscarion que no gane Fernando Haddad por ser el aliado de Lula Da Silva y de Cristina Kirchner, pero de todos modos el triunfo de Bolsonaro abre un gran interrogante para las relaciones bilaterales entre Brasil y Argentina dado lo imprevisible y polémico que es el nuevo presidente brasileño.

Así las cosas, desde el entorno de Macri admiten que en Bolsonaro, Argentina encontrará un socio potable pero «nada fácil». Sobre todo porque Macri no comparte el estilo duro, polémico y frontal del recientemente electo presidente de Brasil.

QUIEN ES QUIEN. LA MESA CHICA DEL PODER EN BRASIL

Eduardo Bolsonaro, Jair Bolsonaro, Brasil
Abogado y funcionario de la Policía, empezó su carrera política en 2014 cuando fue elegido como diputado federal por San Pablo. Llegó a los medios, cuando encabezó una manifestación a favor del impeachment contra Dilma Rousseff con un revolver en la cintura. «Siempre estoy armado», dijo entonces. Durante la campaña fue clave tomando la posta luego de que su padre sufriera un ataque con cuchillo: lo reemplazó en varios eventos y lo impulsó en las redes sociales. En las elecciones renovó su banca y pasó a ser el diputado más votado en la historia de Brasil. Tiene 34 años y, como su padre, hizo comentarios racistas, homofóbicos y a favor de los militares. Hace poco, generó polémica al asegurar que si su padre ganara y no le permitieran asumir, cerraría la Corte Suprema. «Bastan un soldado y un cabo», dijo.

Flavio Bolsonaro, Jair Bolsonaro, Brasil
El primogénito de Bolsonaro es empresario y abogado. Llegó a la función pública en 2003 como miembro de la Asamblea Legislativa de Río de Janeiro y este año, a sus 37 años de edad, fue elegido senador con más del 30 por ciento de los votos. Está casado y tiene dos hijos, defiende la familia tradicional, los valores cristianos y la tenencia de armas. En medio de las denuncias por la viralización de noticias falsas a favor del exmilitar a través de mensajería instantánea, WhatsApp le bloqueó su cuenta.

Carlos Bolsonaro, Jair Bolsonaro, Brasil
Con 36 años de edad, tiene perfil más bajo. Su entrada en política comenzó en el año 2000, siendo elegido el concejal en Río de Janeiro más joven a los 17 años. Sigue en el mismo cargo. Recientemente estuvo en el centro de todas las críticas cuando publicó en redes sociales la imagen de un hombre ensangrentado, con los brazos atados y una bolsa en la cabeza junto a la frase «Sobre padres que lloran en el baño», popularmente usada en alusión a padres decepcionados con los hijos. Se lo acusa de hacer apología de la tortura.

Onyx Lorenzoni, Elecciones en Brasil, Jair Bolsonaro
Es considerado por muchos como el hombre fuerte de Bolsonaro. Tiene 64 años, es veterinario que se convirtió en diputado aliado del candidato del PSL desde 2003, cuando lucharon juntos por el derecho a portar armas. Pertenece al derechista partido Demócratas (DEM) y cumple su cuarto mandato como legislador por Rio Grande do Sul. Será jefe de Gabinete de Bolsonaro.

Gustavo Bebianno, elecciones en Brasil, Jair Bolsonaro
Es presidente del Partido Social Liberal (PSL) y fiel ladero de Bolsonaro. Experto en jiu jitsu, religioso, opositor al aborto, anticomunista rabioso, contrario a la homosexualidad y profesor de artes marciales, su relación con Bolsonaro empezó cuando le mandó un correo años atrás para sumarse a la «batalla» contra la corrupción del gobierno del PT. Asumiría como ministro de Justicia.

Augusto Heleno, elecciones en Brasil, Jair Bolsonaro
Nació en 1947 y empezó su carrera militar en 1964. Es General retirado y excomandante de la misión de paz de Naciones Unidas en Haití. También es miembro del Partido Republicano Progresista, y conoció a Bolsonaro en la década del 70, en la Academia Militar de Agujas Negras. Dijo que «un ladrón con fusil en la mano tiene que ser fusilado» y defendió la dictadura. Asumiría el Ministerio de Defensa.

Paulo Guedes, Jair Bolsonaro, elecciones en Brasil
Es mano derecha de Bolsonaro en todo lo que tiene que ver con la economía. Aunque sea poco lo que se conoce de su programa, a Bolsonaro no le avergüenza decir que cada tema del que habla, primero lo consulta con él. Economista, ultraliberal, oriundo de Río de Janeiro y doctor por la Universidad de Chicago. Según
El Confidencial, es considerado un discípulo de los Chicago Boys, los economistas liderados por Milton Friedman que influenciaron las reformas liberales en Estados Unidos, Reino Unido y Chile. Todo indica que si gana Bolsonaro, él será ministro de Economía. Pero no uno cualquier, un superministro: la propuesta sería fusionar Economía con Hacienda, Planificación, e Industria y Comercio.