Bonfatti: «Hay números que pueden cambiar la elección»

El gobernador se refirió así a la polémica que se produjo por la falta de carga durante el escrutinio provisorio de 807 mesas electorales que reúnen más de 200.000 votos que todavía no fueron contados. El gobernador de Santa Fe, Antonio Bonfatti, dijo hoy que “no habría que hacer interpretaciones apresuradas sobre los resultados definitivos” de las PASO del domingo último porque “hay números que pueden cambiar la elección”.

En ese sentido, la secretaria electoral de Santa Fe, Claudia Catalín, dijo que “va a haber modificaciones en el resultado” de las elecciones que se conoció el domingo por lo que, aclaró, “a los candidatos los vamos a conocer cuando tengamos el resultado definitivo”.

De acuerdo al escrutinio provisorio, el candidato del PRO a la gobernación, Miguel Del Sel, fue el más votado con 481.278 sufragios a favor, seguido de cerca por el Frente Progresista que obtuvo a través de sus dos postulantes, Miguel Lifschitz y Mario Barletta, 475.785 votos, apenas 5.000 menos.

Por esa razón, Bonfatti dijo hoy en declaraciones a la prensa que “no hay nada cerrado”.

Para el radical Barletta, en cambio, las autoridades electorales “han hecho un zafarrancho”.

“Si fuera gobernador ya hubiera pedido dos renuncias por lo menos”, dijo hoy el precandidato radical que perdió la interna frente al socialista Lifschitz.

En tanto, desde el gobierno de Santa Fe informaron que mañana a las 8 se inicia el escrutinio definitivo, que implica “el conteo de votos que tiene validez legal y determinará los candidatos que la ciudadanía elegirá en los comicios generales del 14 de junio”.

A través de un comunicado oficial, la Secretaría Electoral informó que durante las PASO “del total de mesas informadas (7.914), 150 resultaron desestimadas y 657 no fueron recibidas, por lo que no pudieron cargarse los votos emitidos en ellas en los sistemas correspondientes”.

De acuerdo a la información oficial, cada mesa tiene un total de 350 electores, lo que equivale a 282.450 votos sin contar, aunque el promedio de votantes fue del 75 por ciento.

Desde el organismo agregaron que “la desestimación de un telegrama se da cuando éste fue confeccionado con errores insalvables, mientras que la no recepción de telegramas puede obedecer a varias causas”.

En esa línea, explicaron que “las más comunes son: que el presidente de mesa coloque el telegrama dentro de la urna en lugar de entregarlo al jefe de local, trasmitir el telegrama a un número de teléfono erróneo que no corresponde a los servidores de escrutinio provisorio o la existencia de problemas técnicos insalvables en las líneas telefónicas de local de votación”.