Comprueban violaciones denunciadas de los derechos de los niños en los establecimientos de detención bonaerenses

La situación de 3500 niños, niñas y adolescentes privados de la libertad en centros de detención en Bs As

El exdiputado e integrante del Frente Renovador Walter Martello, realizó un informe donde queda a la vista la imposibilidad de la resocialización de los menores en el Gobierno de Daniel Scioli.

La Sala I de Transición del Tribunal de Casación Penal de la Provincia de Buenos Aires, resolvió hacer lugar a la acción de habeas corpus colectivo interpuesto a favor de todos los niños, niñas y adolescentes privados de la libertad en centros de detención dependientes de la Secretaría de Niñez y Adolescencia de la Provincia de Buenos Aires y del Servicio Penitenciario Bonaerense y ordenar a los distintos organismos administrativos y judiciales arbitren los medios necesarios para sanear las carencias denunciadas.
El sistema de responsabilidad penal juvenil brindaba al 13 de setiembre de 2013, contención y tratamiento a un total 3.462 jóvenes, discriminados de la siguiente manera: 559 jóvenes residentes en centros de recepción, centros cerrados y de contención; 2903 en centros de referencia.
El Servicio Penitenciario Bonaerense a su vez informó que al 27 de septiembre de 2013 se da cuenta que dicho organismo aloja 241 personas privadas de la libertad a disposición de los jueces del Fuero.

El ex Defensor Oficial ante el Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil del Departamento Judicial de La Plata, Dr. Julián Axat della Croce, interpuso acción de habeas corpus originaria ante este Tribunal de Casación denunciando el agravamiento de las condiciones de detención que padecen colectivamente los niños y adolescentes alojados en establecimientos de régimen “cerrado”.

Expuso por ejemplo que “una visita realizada al Centro de Recepción de La Plata, dependiente de la Secretaría de Niñez y Adolescencia de la Provincia de Buenos Aires, donde pudo constatar mediante documentación que le fuera exhibida que sobre 427 plazas en centros “cerrados” se hallaban ocupadas en aquella fecha 390; mientras que de las 108 de régimen de semilibertad o contención, las ocupadas eran 47.

Asimismo, da cuenta de haberse verificado mediante la lectura de los legajos de distintos jóvenes, que muchas de las órdenes jurisdiccionales de detención carecen de fundamentación respecto de la modalidad de encierro o nada dicen al respecto, habilitando a las autoridades administrativas a su ingreso al régimen que se estima aplicable, en la mayoría de los casos, al cerrado “y no hacia los más relajados o flexibles (‘semiabiertos’ o ‘de tránsito’) donde existen más cupos y condiciones más favorables de rehabilitación”.

Igual situación de agravamiento de las condiciones de detención predica respecto de los jóvenes alojados en unidades de la órbita del Servicio Penitenciario Bonaerense.
A su vez, remitieron informes respecto de la situación de los niños, niñas y jóvenes de sus respectivos departamentos judiciales, así como de sus lugares de detención, las Defensorías Generales de La Plata, San Nicolás, San Martín, Zárate-Campana, Bahía Blanca, Trenque Lauquen, Mercedes, Morón, Necochea, Pergamino, San Isidro, Dolores, Junín y Mar del Plata.
La falta de insumos, de personal como psiquiatras, psicólogos, médicos, odontólogos y además la medicación no siempre es indicada situación alarmante en todos los casos relevados, solo un ejemplo.

“En un informe de visita de la Defensa Oficial al Centro Cerrado COPA, se denunció que de los treinta y nueve (39) jóvenes internados, catorce (14) se encontraban medicados con inductores de sueño. De acuerdo con el informe psiquiátrico que acompañara la presentación, el cuarenta por ciento (40 %) de los jóvenes evaluados requerían una terapia farmacológica con benzodiazepinas por plantear problemas para conciliar el sueño sin un diagnóstico por patología psiquiátrica que lo ameritara.”

“Después se preguntan porqué los jóvenes delinquen cada vez con más violencia y son reincidentes en su accionar delictivos, es altamente probable que cada vez que vuelvan a la libertad su primer pensamiento es que bajo ninguna circunstancia quieran estar en centros de detención en Bs As.” Sentenció Walter Martello