¿Cuál es la función del cartílago articular?

Por Gustavo Frutos, farmacéutico, director técnico del Laboratorio Dr. Madaus, Curflex (www.curflex.com.ar).

A la hora de movernos, las articulaciones poseen un valor esencial. Para su normal funcionamiento es el colágeno el que actúa como amortiguador, disminuyendo las presiones por el peso a las superficies articulares.
Permite un desplazamiento sin fricción a las superficies articulares.
Si el cartílago se mantiene en buen estado, la función de la articulación no presenta alteraciones. Ante su carencia, las articulaciones más frecuentemente afectadas son los dedos de las manos y pies, hombros, rodillas, columnas lumbar y cervical, cadera.
Existen 22 tipos de colágeno. Las características estructurales y ubicación de los distintos tipos en los tejidos son diferentes, como así también la composición y características de sus fibras.
El colágeno tipo II es el material constructivo cartílago articular. Además de la piel, tenemos colágeno en los huesos, ligamentos, cartílago, fluido sinovial. Todos se desgastan por la degradación del colágeno.

Articulación joven

El colágeno de tipo II es el específico que se encuentra en de la estructura del cartílago de los huesos y articulaciones de todo el cuerpo. Su función es brindar resistencia a la tracción y a la compresión, dada la permanente fricción y exigencia de movilidad que estas articulaciones sufren durante todo el día. Todos los movimientos del cuerpo suponen el uso de éstas, por eso, si el colágeno no cumple su función correctamente, por pérdida, desgaste o inflamaciones, estos movimientos comienzan a limitarse, se vuelven dolorosos, pudiendo producir daños irreparables.
En muchas enfermedades autoinmunes, el sistema ataca el propio colágeno incrementando el deterioro y el avance de la enfermedad. Al no reponerse el colágeno perdido, el malestar asociado a esta problemática se incrementa progresivamente.
En estos casos, la incorporación de colágeno tipo II es fundamental para suplir la carencia del mismo y evitar muchos de los inconvenientes asociados.
Estudios de la Escuela Médica de la Universidad de Harvard han demostrado que pequeñas dosis (menos de 10 mg.) de colágeno no desnaturalizado de tipo II, actúan sobre el sistema inmunitario para prevenir los ataques del organismo contra sus articulaciones.
En un estudio realizado sobre 28 pacientes que sufrían de poliartritis reumatoide severa, la toma de colágeno de tipo II desnaturalizado durante tres meses ha mejorado sustancialmente su estado; cuatro fueron totalmente curados (Science, 261: 1727-1730, 1993.) Al cabo de tres meses de tratamiento con colágeno no desnaturalizado de tipo II, 8 de cada 10 pacientes que sufrían de poliartritis reumatoide juvenil, observaron una disminución de la hinchazón y de la sensibilidad de sus articulaciones (Arthritis and Rheumatism, 39: 623-628,1996.).
Así, entonces, sumar colágeno tipo II puede cambiar la calidad de vida que nos espera.