Declaración de situación de emergencia del sector de transporte vertical

La disminución en la aprobación de los trabajos de reparación de los equipos, la morosidad en los pagos de los abonos, sumada a la competencia desleal de empresas de dudosa idoneidad, está llevando a la quiebra a las empresas del sector, poniendo en peligro miles de puestos de trabajo y repercutiendo directamente en la seguridad de los usuarios.

El sector está viviendo una de las crisis más fuertes, que afecta las estructuras de las empresas que se dedican a la conservación de los equipos de transporte vertical. Debido a la situación actual de la economía del país, han disminuido la aprobación de los presupuestos para las reparaciones de los equipos, sumado a que algunas empresas, para poder sobrevivir, han salido al mercado a competir deslealmente ofreciendo abonos por debajo del valor real, lo cual está atentando contra la sostenibilidad del sector debido a que no cubren los costos mínimos que se requieren para poder brindar un servicio integral e idóneo, y repercute directamente en la seguridad de los usuarios. Por otra parte, estos factores dejan en una situación de fragilidad al sector que se ve en la necesidad de suspender personal altamente capacitado, en muchos casos al despido, debido a la necesidad de achicar sus estructuras o cerrar sus puertas.

En este momento, la situación por la que atraviesa país, se ve reflejada en datos relevantes del sector: durante el primer cuatrimestre del 2014 se realizaron un 50 % menos de instalaciones de equipos nuevos en comparación el mismo período del 2013. Por otra parte, este año el sector facturó un 10 % menos con una inflación que supera el 25 %, teniendo en cuenta el mismo período de referencia. Además, se produjo una reducción de personal de alrededor del 10% en lo que va del año, en un sector que agrupa a 1500 empresas y, hasta el momento de iniciarse la crisis, empleaba a unos 15.000 operarios metalúrgicos de forma directa y 5000 empleos indirectos.

Mientras que las empresas que trabajan bien y respetan los derechos de sus empleados están al borde de la quiebra, las que trabajan mal e informalmente están absorbiendo el mantenimiento de una parte del mercado, con valores que no pueden llegar a sostener ninguna estructura de servicio, y poniendo en riesgo extremo la seguridad del usuario, dado que no cubren los trabajos mínimos e indispensables para mantener un equipo de manera idónea y segura, ni cuentan con el personal técnico y profesional que se requiere para su correcto mantenimiento.

Acerca de FACARA:

La FACARA es una entidad sin fines de lucro que reúne a cámaras y asociaciones de empresas
dedicadas a la fabricación, instalación y conservación de elementos utilizados en el transporte vertical de personas y objetos. El sector comprende más de 1500 empresas en actividad, pertenecientes al sector de fabricación, instalación y mantenimiento. El 85% de la venta e instalaciones de ascensores en todo el territorio argentino la realizan Pymes nacionales, que junto a las empresas encargadas de su mantenimiento, poseen más del 90% del mercado..www.facara.com.ar