Mario Ishii tiene un grave problema, no tiene más a nadie, está solo, en el kirchnerismo duro no lo quieren, en el FR no lo quieren, en el Partido Obrero menos. Su única alternativa es la de besar el anillo del nuevo padrino y reconvertirse políticamente en un baronsito con pantaletas amarillas, hacer buena letra, portarse bien y pedir plata líquida a Heidi. Es más, la situación de JC Paz es desesperante, el Kirchnerismo se gastó todo y al menos Mario Ishii se dió un baño de humildad. El problema lo van a tener en Moreno donde maltrataron y golpearon a militantes del Pro. Ahí si va haber facturas, remitos y devoluciones de gentilezas. Finalmente Mario Ishii hizo los deberes y los va a seguir haciendo, se va a portar bien, le va a llevar la manzana a la Gobernadora… ya pidió pista para ir a besar el anillo del Don de La Rosada. Un pragmático. Un viejo militante nos contó el mito del peronista con la ex líder. «A Cristina solo la acompañamos hasta la puerta del Cementerio, pero no entramos»
El intendente de José C. Paz, Mario Ishii, presenció la jura como gobernadora de María Eugenia Vidal, en la que la flamante mandataria habló de una “provincia quebrada”; por lo que el dirigente justicialista opinó: “Es verdad. La Provincia está quebrada totalmente. Está quebrada la Provincia como están quebrados muchos municipios (por eso a Vidal) hay que ayudarla para que le vaya bien, porque nos va a ayudar a los distritos que tenemos problemas grandes. Hay que trabajar al lado de los que nos gobiernan, de la Gobernadora y del Presidente, es lo que toca”.
Ishii opinó también que el discurso de la gobernadora fue de tono conciliador, y que expresó su deseo de trabajar, y que aunque tendría que haber hablado con más fuerza de algunos temas, como la salud, Vidal no iba a hacer anuncios taxativos sobre temas específicos: “no los puede hacer porque tiene que caminar”.
Vidal también aludió en su discurso al fin de una etapa de egoísmo, pero Ishii no se sintió aludido, aunque remarcó que sí concidió en la visión de una provincia que no está bien, ni económica ni estructuralmente: “me siento identificado con la otra palabra, de que la Provincia está quebrada”, expresó.
