Formidable

Formidable, cerró un clásico del Barrio de Palermo de Av. Cordoba 4799

Formidable, cerró un clásico del Barrio de Palermo de  Av. Cordoba 4799

Cerró Formidable, la tradicional tienda de ropa de Palermo con 105 años de historia. Allí se vestían los futbolistas Roberto Perfumo, Ricardo Bochini, Coco Basile y Silvio Marzolini y artistas como Jorge Porcel, Tristán y Juan Carlos Calabró, y el director de Palermonline Noticias. Cerró «Formidable», la histórica sastrería en la que compraron Perón, Illia, Macri y Kicillof.

Tras 104 años de vestir a numerosos personajes públicos, la tienda fundada por Julio Viniarksy en Palermo baja sus persianas por decisión de su último dueño, Eduardo “Edy” Viniarsky. «Teníamos muchísimo trabajo, pero me cansé», expresó.

formidable%20112

Con este mensaje se despidio Formidable

«Estimados amigos, clientes, vecinos, proveedores y público en general:
Nos dirigimos a ustedes para comunicarles el cierre de nuestra empresa, a partir del día de hoy, 25 de enero del 2022.

formidable%201124
FORMIDABLE fue fundada en 1917, hace 104 años y lo continuamos hasta la 5ª generación dentro de la familia.
También hemos contado con colaboradores de excelencia, cuyo aporte ha sido fundamental a lo largo de tantos años de historia.
Queremos agradecerles su confianza durante todo este tiempo y esperemos que les quede un buen recuerdo de nuestra empresa y de nuestra forma de trabajar.
Dándoles las gracias por su confianza y deseándoles lo mejor, reciban un cordial saludo.
Atentamente, el equipo de Formidable.»

formidable%20112456

Formidable, con las persianas bajas, en Córdoba y Armenia

Por este local pasaron varias generaciones de niños y hombres que cada vez que tenían una fiesta lo visitaban para estar a tono con el acontecimiento. Casamientos, hijos que egresaron de la facultad, bautismos, comuniones y bar mitzvahs. Luego de 105 años cerró para siempre la tienda Formidable, ubicada en la avenida Córdoba 4799, en el cruce de la esquina con Armenia. Allí, todavía queda algo de stock en los muebles de madera robusta clásicos de los negocios de otra época.

formidable%201124567

Todavía con el negocio a medio desarmar, Eduardo Viniarsky (81), dueño de Formidable, junto a su esposa Raquel Azernicky y su hija Bettina, para contar sus sensaciones de toda una vida de trabajo ligada a la tienda. Lo primero que aclara es que todo el mundo lo conoce como Eddy. “Si decís Eduardo acá no saben quién es”. Luego de toda una vida ligada al negocio, Viniarsky mientras termina de liquidar el stock ya reparte su tiempo entre la gimnasia y su pasión por el fútbol. “Camino 7 kilómetros en la cinta y hago bicicleta fija. También tengo mi platea en Avellaneda para ir a ver a Racing que es mi gran pasión”.

G4QPIWYIVJGHHLQ766VS6TZIGA

Negocio familiar

Eduardo Viniarsky, con su mujer, Raquel Azernicky, y la hija de ambos, Bettina

MOQVVAK6RZDOPERG3GAJFPBD5M

Como muchos casos en Argentina, la historia de Formidable arranca con la llegada de un inmigrante ruso al país a comienzos del siglo XX. Julio Viniarsky se subió a un barco junto a su familia en Rusia y trajo hasta el Río de la Plata sus conocimientos de sastre aprendidos en la Rusia zarista. “Se pasaba mucho hambre allá –cuenta Eddy, que escuchó el relato familiar de su abuelo-. Argentina le dio muchas posibilidades para desarrollarse”.

YOKCN7ZSPBCIFH66GH4Y4EPAHQ

Todo arrancó con una casa sobre la calle Armenia que todavía está en pie y un pequeño local en la esquina de Córdoba, en ese momento se llamaba Pedro Rivera y era empedrada. Julio comenzó ofreciendo ropa de trabajo. Al negocio lo llamó “El obrero de Rivera” y confeccionaba overoles y jardineros para trabajadores.

Julio tuvo 5 hijos y, aunque las tres mujeres ayudaban, el negocio era comandado por el fundador y sus dos herederos varones: David y Abraham. “Con el tiempo, vieron que era más negocio vender lo que en aquel momento se llamaba “ropa para salir” -.relata Eddy-. Y así el negocio se volcó a ofrecer camisas, ambos, sacos, pantalones de vestir para adultos y niños”.

Cierra Formidable, un verdadero clásico

La década del 70 marcó a fuego a la familia de Formidable. En cuatro años, desde el 73 al 77 murieron Julio, el fundador de la tienda, y sus hijos Abraham y David. Así en ese momento el negocio quedó a cargo de Eddy. “Tuve que elegir entre el fútbol -jugaba en la primera de Argentinos Juniors- y Formidable. Y la verdad no me arrepiento de nada”, se entusiasma Viniarsky.

Luego de probar otros nombres como “El Campeón”, en la década del 40 quedó sellado a fuego en la puerta del local la denominación actual. Eddy revela cómo fue que eligieron el nombre. “Necesitábamos que tuviera muchas letras diferentes para poder usar cada letra del nombre para los códigos del stock y calcular los costos. Pensá que en ese momento no había computadoras se hacía todo a mano. Las dos opciones de palabras eran Murciélago y Formidable. No hubo dudas de cual elegir”, se sonríe Eddy.

Del boom de ventas a la crisis argentinas

Formidable vendía ropa a los famosos
Eddy se jacta de conocer a muchos de los clientes a los que muchas veces recibe en forma personal.

En un momento de la entrevista, la clienta Verónica Giménez se acercó hasta el local a cambiar el talle de un pantalón de corderoy para su pareja. “No sé qué voy a hacer ahora que cerró Formidable. Acá compraba mi papá y nosotros veníamos con mis hermanos cada junio para comprarle el regalo del Día del Padre. Es un placer acercarse, elegir ropa y charlar con Eddy un rato”, se emociona la mujer.

Formidable tenía un plus que lo hacía diferenciarse de la competencia. Trabajaban con sastres propios que ajustaban la ropa a pedido del cliente sin costo extra. “Esto era único e inigualable. Te comprabas un saco o pantalón y te lo entallabas a medida por el mismo precio del producto”, dice Eddy.

Otra fortaleza de Formidable era que ofrecía a la venta ropa para hombres con sobrepeso, aún mucho antes de aprobada la Ley de Talles. “Tenemos hasta el número 70. Si una persona con sobrepeso se quiere vestir bien viene a Formidable. De hecho muchos clientes ya nos escriben diciendo que no saben qué hacer, que ya nos extrañan”, explica el dueño de la tienda.

Trajes y camisas

Viniarsky recuerda la década del 50 y del 60 como grandes hitos de ventas. Se formaban colas de una cuadra sobre la avenida Córdoba para comprar el regalo para los papás. “En ese momento, cada hijo le compraba un regalo diferente y a eso se agregaba otro para el abuelo o hasta para algún cuñado”, cuenta Eddy.

Formidable, en sus 105 años de historia, también vivió los problemas del país. “Con la hiperinflación de 1989, tuvimos que cerrar la tienda un tiempo –relata Viniarsky-. No teníamos precios de referencia y no sabíamos a qué costo íbamos a poder reponer la mercadería. El riesgo de tener problemas graves era muy grande”. Otro momento difícil fue durante el estallido del 2001. “Fue la etapa que más noté el parate económico del país. No se vendía nada”, dice el dueño de la tienda.

Los mejores clientes de la tienda estaban entre la farándula y los jugadores de fútbol de décadas pasadas que se convertían todos en amigos de Eddy. “En Formidable se vistieron Roberto Perfumo, Ricardo Bochini, Coco Basile, Silvio Marzolini -recita Eddy como si fuera un equipo de estrellas-. Además, de artistas como Jorge Porcel, Tristán y Juan Carlos Calabró”.

Final feliz para Formidable

Los trajes eran arreglados por sastres, sin costo extra.

Un día después de 105 años, Eddy decidió bajar definitivamente las persianas de Formidable. Desde 1995, su hija Bettina lo ayudó a manejar el negocio tras volver luego de tres años de estar radicada en México. “Volví para dar una mano un tiempo corto y me quedé 26 años –recuerda la hija de Eddy-. Pero ya está tengo otros proyectos que tengo que atender”.

Luego, el dueño de Formidable puso sus fichas en su nieto Manuel Krigel. “Me estuvo ayudando durante 3 años, pero su vocación está en el periodismo, así que me quedé sin sucesores”, se sonríe Eddy.

Hace unos meses, el dueño de la tienda juntó a sus 17 empleados una hora antes del cierre y junto con un abogado le explicó las condiciones del final de Formidable. “Les pagué todo lo que correspondía a cada uno de los trabajadores. “No tengo ningún juicio y eso me permite dormir tranquilo a la noche”, explica Eddy, mientras hace el gesto de apoyar la cabeza en la almohada.

Viniarsky pasa la mano por el mostrador como si lo estuviera acariciando por última vez, le muestra al cronista fotos con famosos, con los vendedores históricos a los que recuerda a todos por el nombre y de su familia: todas en el local de Formidable. Allí donde construyó su vida, junto a la de sus antepasados inmigrantes y que ahora cerrará para siempre.

Políticos, deportistas, artistas, famosos, todos iban a la tienda. “Venían muchos políticos, el ex presidente Arturo Illia nos compraba sus corbatas; el General Juan Domingo Perón mandaba a su secretario a comprar sus moñitos en Formidable; venía Ricardo Gil Lavedra; el Cuto Moreno; Mauricio Macri nos compraba las camisas y hasta el Gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof compró un ambo para él y para sus hijitos para usar el día de la asunción. Gerardo Martínez de la UOCRA desde antes de ser conocido; Luis Zamora nos ha comprado, siempre correcto y humilde. Hasta Carlos Menem y Raúl Alfonsín mandaron a comprar ropa al local”, recordó en un pasaje de la entrevista.

Entre los que compraban en la tienda había deportistas como Roberto Perfumo, Ricardo Bochini, Coco Basile y Silvio Marzolini y artistas como Jorge Porcel, Tristán y Juan Carlos Calabró, su fiel amigo, con quién compartían edificio e iban a comer todos los lunes.

También contó que Néstor Kirchner nunca compró en la sastrería. Cuando se le pregunta sobre su singular look de ambos cruzados, Eduardo no dudó y adelantó una tendencia: “En Europa es tendencia el pantalón con pinza y el ambo cruzado. El negocio del diseñador es siempre hacerle una variante, más corto, más entallado, más largo. En un par de años volverá el ambo cruzado, como el que usaba Kirchner”.

En otro orden, señaló que sus empleados se fueron con doble indemnización. «Teníamos empleados con más de 30 años de antigüedad. Por suerte están todos ubicados, esta era una escuela de vendedores», expresó.

«Estoy pensando en viajar, voy al gimnasio tres veces a la semana y hago cinta y bicicleta fija, voy al dentista o al médico y en eso se me pasan los días. Quiero seguir yendo a la cancha a ver jugar a Racing”, concluyó el dueño de Formidable, que todavía no terminó de desarmar todo el local. Lo hace de a poquito, son muchos los recuerdos y los amigos que hizo en la tienda.

20220520 213156

Los mensajes de sus clientes

«Después de comprarme toda mi ropa por 40 años, la noticia del cierre me caló hondo. ¿Dónde van a quedar mis charlas de fútbol con Eddy? Deseo a toda la familia lo mejor. Era mi lugar. Lo que necesitaba lo compraba en FORMIDABLE. Mi deseo que esta nueva etapa la vivan con el orgullo de haber llevado adelante un negocio formidable, haciendo un juego de palabras. Los abrazo a todos!!!», «Que pena. Un gran abrazo. Fuimos compañeros de secundaria con su dueño.», «Institución del barrio donde no dudaba encontrar lo que buscaba para mi esposo y de la mejor calidad. Los voy a extrañar.», «Que triste noticia, Betty es lamentable que una tienda con tanta historia tenga que tomar esta decisión. Más de 100 años y 5 generaciones… No solo eso… Creo que son incontables las familias que tuvieron buenos momentos y consuelo en tristes momentos con la ropa que compraron en esa tienda. Deseo un gran nuevo comienzo para toda la familia Formidable.», «Tengo un excelente recuerdo de Eduardo y de sus vendedores, en los 70 íbamos con mi viejo a comprar, como compramos varias prendas nos hacía siempre una «atención». Un abrazo grande para él….», «Tengo recuerdos muy lindos de FORMIDABLE, conocí a los abuelos, a los hermanos,a sus hijos,y también a todos los empleados,inclusive fui ayudar para el Día del padre,fue una epoca gloriosa e inolvidable,bueno todo se termina,queda nada más que los recuerdos de vida». «gracias por tanto. Un gran abrazo a toda la familia de Formidable.», «Fui con mi Papá cuando tenía 12 años a comprarme mi primer saco para ir al Secundario, hermosos recuerdos».

155512878 1150299998722266 8437174854821517587 n

La vida es así de Formidable.

193315886 1202874293464836 3122823416839235719 n
201904405 1215846918834240 7533410618494436035 n
211290922 1224142371338028 4690763357166933503 n
240114538 1260731054345826 61045715140908740 n
244713476 1292139457871652 7718963021182272487 n
247575845 1302004950218436 3963140376499886943 n
247581117 1300067760412155 7847417547798420279 n
265400315 1331666063918991 8168924850800385684 n
272382940 1359257747826489 3000171071381240574 n%20(1)
272382940 1359257747826489 3000171071381240574 n
272674899 1359257751159822 6812701710536220332 n