Google, Facebook, LinkedIn, Amazon, Microsoft y Yahoo piden igual velocidad para los contenidos

Los gigantes se unen en defensa de la neutralidad en la Red

Más de un centenar de empresas tecnológicas han solicitado a la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC, por sus siglas en inglés) de EE UU que retire su propuesta de terminar con el principio de neutralidad en la Red (que haya una sola velocidad para todos los contenidos). Las compañías aseguran en una carta enviada a la FCC que la nueva regulación constituye “una grave amenaza” contra Internet. El reclamo de firmas como Google, Facebook, LinkedIn, Amazon, Microsoft y Yahoo coincide con el rechazo en público a las nuevas normas por parte de dos comisarias de la FCC. Sus declaraciones ponen en duda si el presidente de la comisión cuenta con los votos suficientes para sacar adelante su propuesta.

Tom Wheeler, presidente de la FCC, planteó hace dos semanas una nueva regulación que permitiría a los proveedores de Internet cobrar a las empresas si quieren disfrutar de un servicio más rápido para transmitir sus contenidos, lo que ha sido descrito como una red “de dos velocidades”. La decisión de Wheeler llegaba en respuesta a una sentencia judicial del pasado enero que prohibía a la FCC decidir si los proveedores pueden dar prioridad o incluso bloquear contenidos.

“La comisión quiere proponer unas reglas que permitirían a los proveedores de conexiones a Internet y teléfono discriminar, tanto a nivel económico como tecnológico, a las compañías, así como imponerles nuevas tasas”, asegura la carta. Las empresas responsables de algunos de los avances tecnológicos más importantes de las últimas décadas solicitan a la FCC que las proteja tanto a ellas como a los usuarios. “En vez de permitir negociaciones individualizadas y discriminación, las reglas de la comisión deberían protegernos del bloqueo de contenido, trato discriminatorio y pagos por servicio preferente”, dice el documento.

Entre los firmantes está Netflix, un sevicio de videoclub por Internet. La compañía ha levantado críticas, ya que defiende la neutralidad mientras negocia con uno de los mayores proveedores, Comcast, que dé acceso prioritario a los usuarios que quieran ver películas de su catálogo.

Este ejemplo refleja la complejidad de la tarea a la que se enfrenta la FCC, cuyo debate sobre la neutralidad se alarga ya una década. La división afecta también a sus filas. El envío de la misiva este miércoles se produjo de manera paralela a las declaraciones de dos miembros de la comisión, de quienes depende el voto de las nuevas reglas. Durante su comparecencia, la comisaria Jessica Rosenworcel afirmó que la normativa le causa “serias preocupaciones” y pidió a la FCC que retrase el voto previsto para el próximo 15 de mayo. “Sería un error cerrar el debate de la opinión pública ahora mismo”, afirmó.
Una segunda comisaria, Mignon Clyburn, invitó a la FCC a revisar sus políticas. Clyburn escribió en su blog que “no hay ninguna duda de que mantener una Red libre y abierta es un valor fundamental de nuestra democracia y yo tengo un compromiso inquebrantable con su independencia”.

La nueva normativa de la FCC necesita tres votos a favor para salir adelante. El presidente cuenta con el respaldo de los dos comisarios republicanos, pero el rechazo de Rosenworcel a cerrar el debate y las declaraciones de Clyburn ponen en duda que pueda contar con un tercer voto.
A pesar del varapalo, la comisión mantenía ayer la celebración de la votación. “Seguir adelante permitirá a los ciudadanos revisar y comentar la propuesta”, aseguró una portavoz de la FCC. El organismo, independiente de la Administración de Obama, sostiene que la normativa les permitirá “proteger a los consumidores y emprendedores de Internet”.

Sin embargo, un millón de estadounidenses ha firmado ya contra de la propuesta. Otras 86 organizaciones lideradas por la Unión Americana por las Libertades Civiles ha solicitado también a la FCC que modifique la clasificación de las empresas proveedoras de Internet para equipararlas a las telefónicas. Este movimiento, aseguran, sí permitiría a la comisión regular sus actividades de manera que respeten el principio de neutralidad en la Red que ha facilitado su funcionamiento hasta ahora.