La Masonería Argentina recuerda hoy el 27 de febrero de 1812, cuando el
hermano masón Manuel Belgrano estableció dos baterías de artillería a
orillas del río Paraná en la Villa del Rosario y alrededor de las 18:30
dispuso que fuera enarbolada una bandera de dos franjas horizontales,
blanca y celeste, que había creado con los colores de la escarapela
nacional. Fue confeccionada por María Catalina Echevarría de Vidal; el
izamiento inaugural estuvo a cargo de Cosme Maciel.
¡Soldados de la Patria! En este punto hemos tenido la gloria de vestir la
escarapela nacional que ha designado nuestro Excmo. Gobierno: en aquel, la
batería de la «Independencia», nuestras armas aumentaran las suyas;
juremos vencer a nuestros enemigos interiores y exteriores, y la América
del Sur será el templo de la Independencia y de la Libertad. En fe de que
así lo juráis, decid conmigo «¡Viva la Patria!»
Belgrano había anticipado en un informe que no usaba el rojo «para evitar
confusiones» porque era el color de los ejércitos «realistas». El 13 de
febrero de 1812 había propuesto la adopción de una escarapela nacional
para los soldados y 10 días después la adoptó luego de que el 18 de
febrero de 1812 la Junta abolió la escarapela roja y reconoció la blanca y
celeste.
El 20 de julio de 1816, el Congreso de Tucumán consagró definitivamente el
pabellón celeste y blanco.
La Bandera, la Escarapela, el Escudo y el Himno Nacional son los cuatro
símbolos nacionales de nuestro país.
Nicolás Orlando Breglia
Gran Maestre
