La Justicia frena el megashopping de IRSA en Palermo denominado Arcos Gourmet, en la manzana comprendida entre Av. Juan B. Justo, Av. Santa Fé, Godoy Cruz y Paraguay.

El juez Aurelio Ammirato hizo lugar a una medida cautelar presentada por un grupo de dirigentes y ordenó al Gobierno de la Ciudad la suspensión de las obras para construir un nuevo shopping denominado Arcos Gourmet, en la manzana comprendida entre Av. Juan B. Justo, Av. Santa Fé, Godoy Cruz y Paraguay.

La acción de amparo fue presentada por el ex legislador porteño Facundo Di Filippo, el miembro de la junta comunal 14 por Movimiento Emancipador Marcelo Charlon, Fito Rossi de la Asociación Lago Pacífico y el legislador Rafael Gentili de SUMAR I+D.

Se le ordena al Gobierno porteño que paralice la construcción llevada a cabo por el grupo IRSA para la construcción del emprendimiento hasta que se falle sobre el fondo de la cuestión.

Entre los argumentos del recurso de amparo, los denunciantes informaron que se tomó conocimiento de la obra durante el año 2012 sólo por el cartel que se ubica al frente del predio mencionado, el cual detalla las obras de excavación y demolición, algo que para los mismos es inconstitucional e ilegal ya que no se cuenta con el permiso correspondiente además de no contar con el debido estudio de impacto ambiental. “Vale mencionar que el predio es zonificación UF (urbanización futura), lo cual impide la privatización del 65% del predio y la posterior explotación del emprendimiento”, se detalla.

La Justicia frena el megashopping de IRSA en Palermo
El juez Aurelio Ammirato hizo lugar a una medida cautelar presentada por un grupo de dirigentes y ordenó al Gobierno de la Ciudad la suspensión de las obras para construir un nuevo shopping denominado Arcos Gourmet, en la manzana comprendida entre Av. Juan B. Justo, Av. Santa Fé, Godoy Cruz y Paraguay.“Este fallo comprueba que comenzaron a hacer una mega obra de este nuevo shopping sin tener ni un solo papel en regla. El grupo IRSA debe pensar que no tiene que cumplir con la ley ya que tiene la cobertura del gobierno de la ciudad y el nacional ”, afirmó Di Filippo.

Para dar lugar al recurso interpuesto, el juez Aurelio Ammirato consideró que la empresa IRSA sólo contaba con un visado de la Dirección General de Interpretación Urbanística que no implica permiso de demolición y de obra, pues constituye tan sólo un paso previo al trámite de registro de planos y otorgamiento del permiso de obra.

“Asimismo el ONABE (hoy ADIF), organismo nacional que concesionó el predio lo hizo para el uso exclusivo en el rubro gastronomía, salvó nueva autorización, con la que no cuenta hoy el grupo IRSA. Otra irregularidad la aportó la Dirección General de Obras y Catastro al informar a la justicia que en el formulario definitivo de modificación, ampliación y demolición parcial de obra no surge fecha alguna de concesión del permiso en cuestión, y sólo se cita la disposición. Más contundente aún es la información de dicha dirección que aporto al amparo en la cual se constata que hasta mayo de este año no se registraron presentaciones autorizantes de obra para la zona en cuestión, cuando las obras comenzaron hace más de un año”, se agrega en el texto.

Las obras del mencionado shopping se estaban realizando frente a las ex Bodegas Giol (hoy refuncionalizadas como Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva), en una intervención de 230 millones de pesos para ocupar tres de las 16 hectáreas de los terrenos y galpones vecinos a las vías del ferrocarril San Martín, con una consesión hasta enero de 2022.