La muerte de la jirafita recién nacida en el Zoológico de Buenos Aires reaviva el debate

La muerte de la jirafita recién nacida en el Zoológico de Buenos Aires reaviva el debate sobre la reproducción de especies exóticas en cautiverio.

Hace trece días, la jirafa Jackie dio a luz a mellizos -una hembra y un macho-. Ayer por la tarde, una de sus crías falleció a pesar de los esfuerzos del equipo veterinario, quienes volvieron a denunciar la falta de apoyo de la empresa concesionaria Jardín Zoológico S.A.. La jirafita recién nacida es una víctima más, que se suma a la del oso polar Winner, su hermana Lara y los dos lobos marinos recientemente fallecidos en nuestro Zoo. Urge revertir esta situación que es absoluta responsabilidad del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.

Lara, una cría anterior producto de un embarazo con el mismo macho del zoológico de Chile, murió inmediatamente después de ser trasladada a un zoo privado en la provincia de Rio Negro.

En la legislatura porteña se están tratando diversos proyectos para transformar al zoológico en un “Jardín Ecológico”; todos ellos plantean la prohibición de reproducir animales en cautiverio salvo cuando se trate de especies nativas en peligro de extinción y su destino sea la reintroducción a su hábitat natural. Llama la atención que el Gobierno de la Ciudad siga permitiendo estas prácticas cuando la Agencia de Protección Ambiental en su propuesta “Zoológico Verde” (poco clara en toda la temática) plantea con claridad prescindir de las especies exóticas.

La reproducción de especies exóticas en nuestro zoológico tiene como claro fin sostener un comercio de animales para, si logran sobrevivir, mantenerlos cautivos durante toda su existencia para exhibirlos, en muchos casos con fines comerciales.

La jirafa fallecida ayer por la tarde no tenía nombre oficialmente, ya que se lo suelen poner los visitantes; aunque desde el zoológico adelantaron que podría haber sido «Esperanza». Fue concebida en forma natural, con el mismo macho chileno con el que había sido concebida Lara. El nacimiento de mellizos no suele ser común entre las jirafas; este es el tercer caso de embarazo múltiple conocido a nivel mundial.