La piedra en el zapato de Larreta. Lopérfido y sus «frases celebres».

Lopérfido: «Se demostró que lo que dije sobre los desaparecidos era verdad»

Luego de la polémica por sus dichos, el director artístico del Teatro Colón afirmó que fue víctima de «un ataque fascista» cuando «ahora se demostró que lo que se dije era verdad». «Nadie pidió disculpas» por esos ataques, agregó.
Darío Lopérfido, ex ministro de Cultura de la Ciudad y director artístico del Teatro Colón, fue el centro de numerosos pedidos de renuncia a partir de haber cuestionado la cifra de detenidos-desaparecidos durante la última dictadura militar y, sobre ese punto, afirmó que fue víctima de «un ataque fascista» cuando «ahora se demostró que lo que se dije era verdad», y «nadie pidió disculpas» por esos ataques.

«Hago una autocrítica de mi ira, de haber perdido la frialdad. No de los dichos porque se demostró que decía la verdad», ratificó el funcionario, que se vio envuelto en una polémica con los organismos de derechos humanos cuando cuestionó la cifra de 30 mil desaparecidos.

En ese debate, Lopérfido se apoyó en un reciente informe del Ministerio de Justicia que indica que hubo 8.630 desaparecidos.

«La primera reflexión que hago es que yo no mentí ni en eso ni cuando dije que el kirchnerismo hizo la mayor estafa audiovisual de la historia. Sufrí un acoso de naturaleza estalinista por decir algo que era verdad. Y si tengo que hacer autocritica, es que me dejé ganar por la ira. Y me dejé ganar por la ira porque me parecía de canallas decirme negacionista cuando lo que yo estaba diciendo, que lo dije en el marco de un debate sobre los ’70, fue lo mismo que cuatro meses después confirmó un informe hecho durante la administración de Cristina Kirchner», puntualizó.

«No me gusta que se vean los ’70 como un recuerdo romántico. Rechazo esa exaltación del valor de entregar la vida», agregó.

Télam: Llamó la atención, por lo menos, el interés del Gobierno por aclarar que la cifra que simbolizó la lucha de los organismos de derechos humanos no era cierta.

DL: Es que no hubo ningún interés. Yo estaba en un debate sobre la violencia en los ’70 y lo que dije lo dije en ese contexto y luego se replicó las redes sociales. Lo que pasó es que sectores afines al gobierno que se fue lo usaron para acosarme de manera casi física, para amenazarme de muerte. Yo soy una persona bastante fría, cerebral. No me conmueven muchas cosas. Ni los elogios ni las críticas. No me interesa que me quieran o me odien. Por eso mi única autocrítica es haber abordado el tema con ira.