La comisión de Tránsito y Transporte de la Legislatura porteña emitió un dictamen favorable del proyecto del Gobierno de la Ciudad para crear una aplicación oficial, denominada «Taxi BA», a través de la cual los usuarios del servicio de viajes podrán solicitar un vehículo a través de los teléfonos celulares, con la opción de abonar el servicio con tarjeta de débito y crédito.
La iniciativa, elaborada por el ministerio de Desarrollo Urbano, fue acompañada por todos los bloques legislativos y girada al recinto de sesiones; en tanto recibió críticas de parte de la Cámara de Radio Taxis, cuyos representantes aseguraron en la reunión de la Legislatura que la aplicación representa una «competencia desleal» a la actividad que realizan.
Puntualmente, la propuesta incluye un pedido a los diputados para que permitan un cambio al Código de Tránsito y Transporte de la Ciudad a partir de la incorporación -dentro del artículo que se refiere a las opciones de pedido del servicio de taxis- de la alternativa del uso de la nueva aplicación a las ya vigentes de la vía pública, paradas autorizadas, vía telefónica o mensaje de texto.
Además, establece que el pago por el servicio podrá realizarse tanto en efectivo o «a través de los medios electrónicos u otros canales alternativos mediante el uso de tarjetas de crédito o débito».
La legisladora del PRO Cristina García explicó que la aplicación «va a generar un cambio cultural en la forma de pedir un taxi» y aseguró que «el Estado debe trabajar para legislar y modernizarse ante la llegada de empresas ilegales como Uber».
La propuesta de la administración local aparece como una opción del Gobierno de la Ciudad para competir con el servicio de viajes Uber, que desembarcó este año en Buenos Aires y generó críticas por no cumplir con los requisitos legales para su funcionamiento.
En sintonía, el diputado Claudio Palmeyro, ligado al Sindicato de Peones de Taxis, respaldó la propuesta al sostener que «va a significar un salto cualitativo en la mejora de la actividad y un beneficio para el taxista».
«El enemigo de nuestra actividad no es esta aplicación oficial, sino las empresas ilegales», aseveró.
Por su parte, el diputado Maximiliano Ferraro, de la Coalición Cívica, señaló que «vemos como un avance esta aplicación porque acompaña cierta innovación que hay que incorporar al sistema de transporte público de la Ciudad».
La iniciativa, en tanto, establece algunas características nuevas que podrían experimentar los pasajeros de los taxis porteños en sus viajes, como acceder en la plataforma de la aplicación a la identificación del vehículo y al conductor que va a prestar el servicio.
También podrán «generar un reporte electrónico del viaje, consignando las principales características del mismo como fecha, hora, lugar de inicio y fin del servicio y el importe abonado».
Al respecto, Héctor Campos, de la Cámara de Radio Taxis, manifestó que la propuesta del Ejecutivo «no fue consensuada» y remarcó que «este proyecto es una competencia desleal» para las 42 empresas que funcionan en la Ciudad bajo esa modalidad.
En ese marco, solicitaron que el texto de la ley contemple la posibilidad de que el pasajero que quiera un servicio a través de la aplicación pueda elegir «entre un taxi de radio o uno común», así como pidieron que el taxista pueda seguir percibiendo el valor equivalente a seis fichas que en la actualidad recibe de manera adicional al momento del viaje.
Por su parte, Federico Álvarez, en representación de los trabajadores independientes del servicio de taxis, consideró «obsceno que un puñado de empresas de radio taxis quiera decidir por sobre 40.000 trabajadores».
«Necesitamos de esta herramienta para combatir a las empresas ilegales, que son las que tientan a nuestros pasajeros», afirmó.
