Los que resisten a Monsanto

En el marco de una creciente movilización nacional contra Monsanto, con fuertes repercusiones en Malvinas Argentinas, provincia de Córdoba, y también en Buenos Aires y ante la inminente presentación de un proyecto de ley de patentamiento de semillas anunciado por parte del Gobierno Nacional, se realizó la conferencia “Resistiendo a Monsanto: ciudadanas y chacareros del norte y del sur”, organizada por el equipo legislativo VerdealSur, coordinado por el diputado de la CABA Pablo Bergel (Proyecto Sur).

De la actividad participaron Percy Schmeiser, granjero canadiense y María Godoy, una de las Madres del Barrio Ituzaingó Anexo de Córdoba; ambos ganaron sendos juicios, uno contra Monsanto por cobro de semillas patentadas, las otras por los desastres sanitarios de las fumigaciones. Participaron además, los diputados nacionales Fernando “Pino” Solanas y Jorge Cardelli (Proyecto Sur), Mario Cafiero, presidente de Proyecto Sur Provincia de Buenos Aires y Pedro Peretti, de la Federación Agragia Argentina (FAA).

«El patentamiento de semillas que impulsa la corporación Monsanto y sus lobbistas en el Estado, encabezados por la propia presidenta Cristina Fernández y su Ministro Yauhar constituye un nuevo estatuto legal y seminal del coloniaje”, denunció el diputado Pablo Bergel en la apertura de la conferencia.

“Las primeras víctimas serán los agricultores familiares y los chacareros pequeños y medianos que como siervos medievales, tendrán que pagar anualmente su gabela al señor de los transgénicos. Inmediatamente después, los ciudadanos del campo y las ciudades, víctimas crecientes de enfermedades y muertes provocadas por las fumigaciones de los agroquímicos Monsanto, y en tercer lugar, todos los ciudadanos que en tanto consumidores sólo encontramos en las góndolas que el 80 % de los alimentos contienen transgénicos dañinos para nuestra salud, sin que ninguna etiqueta nos advierta ni ningún gobierno nos proteja”, agregó.

Por su parte, Percy Schmeiser, chacarero de Bruno, Canadá, que se convirtió en un símbolo internacional de los derechos de los agricultores independientes por su batalla legal de más de diez años con la corporación de agroquímicos Monsanto, expresó: “Si algo nos va a llevar a tener más hambre en el mundo son los transgénicos, nosotros en Canadá hemos tenido transgénicos durante 16 años y el daño ya se hizo. Hagan todo lo que sea posible en Argentina para que no se incorporen, sino los granjeros van a perder su libertad e independencia. Hoy tienen la chance de elegir, mantengan los transgénicos fuera de Argentina. Pónganse de pie y peleen por sus derechos y libertades, no se los entreguen a una corporación”.

María Godoy, una de las pioneras en reclamar a las autoridades y a difundir la problemática del uso de agrotóxicos y sus consecuencias para la salud en Córdoba señaló: “La lucha contra Monsanto tiene que seguir, tenemos una tarea común, salvando todas las diferencias, unidos con un mismo objetivo, que es echar a Monsanto de Malvinas Argentina, Córdoba y de toda América Latina. Si echamos a Monsanto, vamos a tener una Ley de Semillas como quiere el pueblo, vamos a lograr que las semillas sean las nuestras y eso es soberanía alimentaria, si perdemos nuestra soberanía alimentaria, perdemos nuestra soberanía como país”.

De la conferencia participó además Fernando “Pino» Solanas, Diputado Nacional, quien denunció que “Monsanto invirtió millones de dólares para adquirir empresas semilleras en todo el mundo, y terminó controlando la química y la agricultura. El destino final es adueñarse de la alimentación mundial a través de los OGM (organismos genéticamente modificados) y de sistemas de patentes que le otorgarían la propiedad de las semillas”.

Por su parte, Pedro Peretti, de la Federación Agragia Argentina (FAA) señaló: “Necesitamos una ley que le ponga limites a las multinacionales, y no que beneficie al modelo de sojización, de monocultivo y de concentración de tierras, es una tarea del Estado, él tiene que regular. Son grupos e intereses muy poderosos, se los derrota uniéndonos y no dividiéndonos artificialmente”.

Mario Cafiero, Presidente de Proyecto Sur Provincia de Buenos Aires, manifestó que “Argentina lleva aprobados 27 eventos de transgénicos de los cuales los Kirchner aprobaron 20. La contaminación no termina en el campo, sino en la mesa de cada uno de los argentinos, hoy como país somos un contraejemplo. La cuestión ambiental no es solo la megaminería, también lo es comida y los granos, aunque los socios económicos que están atrás de todos estos emprendimientos son los mismos”.

En coincidencia con Cafiero, Jorge Cardelli, Diputado Nacional y autor de un proyecto alternativo de la Ley de Semillas, expresó: “El Estado tiene una gran responsabilidad en la preservación de la biodiversidad y de las culturas originarias. Hoy esto no se defiende y la idea del proyecto es ver si podemos generar una ley en ese sentido. Tenemos que darle fuerza a un planteo político y estatal en este tema. Si seguimos con la vieja ley, Monsanto nos destruye”.