Armada

Marino de barrios porteños: Teniente Panal de la Armada Argentina.

El Teniente Panal, nacido en Barracas y criado en San Telmo quien hoy es Segundo Comandante del patrullero ARA King.

Teniente de Navío Tomás Panal de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires

“La Armada es un estilo de vida porque está en todo, no sólo en el trabajo, sino en la forma en que uno se maneja, en los valores que te da”

25-09-2020. El marino nacido en Barracas y criado en el barrio de San Telmo, es el Segundo Comandante del patrullero ARA “King”. A bordo de la unidad, el Teniente de Navío Tomás Panal habló sobre su vocación, de su carrera en la Armada Argentina y su vida antes de ingresar, y de las actividades que realiza el patrullero en el litoral argentino.

En navegación – El Teniente de Navío Tomás Panal tiene 35 años, comenzó su carrera en la Armada Argentina en el 2006 y es la tercera generación de su familia en pertenecer a la Fuerza. Sus ganas de ser parte de la Institución nacieron desde muy pequeño y hoy asegura: “Lo que soy, lo soy gracias a la Armada; la Armada terminó de afianzar los valores que tengo”.

El patrullero ARA “King” pertenece a la Escuadrilla de Ríos, con asiento en la Base Naval Zárate, y hoy se encuentra en navegación, realizando diversas actividades en el interior de las vías navegables del Litoral Fluvial Argentino.

Durante el mes pasado, el “King” estuvo desplegado en el puerto de Rosario, Santa Fe; allí, junto a otras unidades, brindó apoyo logístico a los brigadistas de la Armada, de organismos nacionales y provinciales, que combatieron los incendios en el Delta del Paraná.

En julio, en tanto, brindó asistencia a las poblaciones ribereñas que se encontraban en condiciones de aislamiento en el partido de Baradero, donde personal de la Armada y de la Municipalidad distribuyeron víveres a los vecinos de la Isla del Medio e Isla Diablo para hacer frente a la pandemia de COVID-19. “Es esencial que la Armada Argentina apoye al pueblo y a las familias ribereñas”, sostuvo el Segundo Comandante del ARA “King”.

Formarse para navegar

Era adolescente cuando comenzó a ir a las jornadas de puertas abiertas de la Armada y conocer las unidades navales. Pero fue durante una conversación familiar que descubrió su vocación. “En una charla, con un tío, Capitán de Navío médico y Veterano de la Guerra de Malvinas, tuve la oportunidad de interiorizarme sobre sus vivencias en la Armada y la curiosidad comenzó a picarme”, contó Tomás Panal.

De a poco se fue convenciendo de que su futuro estaba surcando los mares y ríos argentinos y empezó a preparar el ingreso a la Escuela Naval Militar en Río Santiago. “Son muchas las etapas que se suceden en la escuela y uno, día a día, va experimentando algo nuevo.”

Su primera navegación fue a bordo, casualmente, del patrullero ARA “King”. “Recuerdo que fue un solo día, pero hubo mucho viento, mucha ola y mucho movimiento; no estaba acostumbrado pero fue una gran experiencia para mí”.

Hoy le toca a él recibir a los cadetes de la Escuela Naval Militar: “Me pongo en el lugar del cadete y los marinos más modernos con sus dudas e incertidumbres y con las ansias de aprender de los más antiguos. Trato de brindar a cada año lo que necesiten en su primera navegación”.

Contó que su primer destino fue en el aviso ARA “Sobral” como Jefe de Detall, donde conoció de cerca el trabajo de los buzos de salvamento, lo que llamó su atención. “Me gustó el ámbito en el que se desarrollaban y comencé a averiguar cómo ser uno de ellos”. Así fue como se preparó mucho físicamente para comenzar el Curso de Buceo de Salvamento. Y lo finalizó con éxito.

Como buzo de salvamento realizó diferentes intervenciones a lo largo de su carrera pero nunca olvidará su primera vez en la Antártida: “Es una experiencia única, desde que uno empieza a cruzar el Pasaje de Drake con olas enormes hasta ver los primeros témpanos de hielo flotando”.

Si piensa en el futuro, le encantaría estar siempre a bordo de un barco, volver a la Antártida, tener la oportunidad de ser destinado a la Escuela de Buceo y adiestrar a los futuros buzos de salvamento.

“La Armada es un estilo de vida porque está en todo, no sólo en el trabajo, sino en la forma en que uno se maneja, en los valores que te da, en la participación con la sociedad, en el trato con los compañeros y amigos”, destacó.

Marino de barrios porteños

Aunque nació en Barracas, Tomás Panal desarrolló gran parte de su vida en el barrio de San Telmo, donde vivió con sus padres y sus hermanos. Asistió al colegio primario “Santa Catalina” y el secundario lo cursó en el colegio “Esteban Echeverría”.

“Mis mejores recuerdos y la mayor cantidad de amigos los tengo del Polideportivo ‘1° de Mayo’, donde jugaba a la pelota y pasaba todo el día”, resaltó respecto del club de su infancia. Aún hoy disfruta del fútbol como deporte aunque confiesa que lo hace cada tanto según la realidad de la pandemia y sus años, “antes jugaba una o dos veces por semana, pero uno también va creciendo y se va haciendo más viejo”, ríe.

Por supuesto su familia tiene un lugar especial en su vida y sus recuerdos “cuando volvía de la Escuela Naval los fines de semana, comía las milanesas con papas fritas de mamá que son las más ricas”. Hoy se hizo fanático de la lasaña que prepara su esposa y que lo espera cada vez que vuelve de una navegación.