Media sanción para la prevención y erradicación del ciberacoso sexual infantil

El proyecto presentado por los senadores por el Frente Renovador, Micaela Ferraro y Sebastián Galmarini, obtuvo media sanción en la última sesión, con el apoyo de los legisladores de todos los demás bloques. El mismo propone poner en marcha en la provincia de Buenos Aires, Políticas Públicas que aseguren la Concientización, Prevención y Erradicación del Ciberacoso Sexual Infantil, también conocido como grooming.

En 2013 fue sancionada la ley 26.904 que tipifica la figura del ciberacoso y lo condena de 6 meses a 4 años de prisión. Pero todavía no existe en la provincia de Buenos Aires un plan estratégico de prevención, para informar a padres, menores y educadores. Al respecto, la senadora Ferraro expresó: “Cuando las mamás del grooming llegaron a Tigre, rápidamente entendimos que trabajar en la prevención era una prioridad. Muchas veces como padres, ignoramos los peligros a los que están expuestos los niños cuando navegan en Internet, y es ahí donde nos volvemos vulnerables”.

“Resulta de suma importancia poner en marcha todos los mecanismos de prevención que esta ley provee. Estos nos permitirán llegar a padres, maestros, niños y adolescentes con información clara y concisa. Además de la puesta en funcionamiento de una línea telefónica gratuita con asesoramiento y asistencia a la víctima”, agregó al respecto la senadora Ferraro.

El ciberacoso comprende todas las prácticas “on-line” utilizadas por pedófilos para lograr el contacto con menores o adolescentes, con el objetivo de ganar su confianza y la creación de un vínculo con ellos. Estos individuos lo hacen a través de identidades ficticias, fingiendo tener la misma edad y sentimientos, para luego lograr el encuentro real y concretar el abuso sexual.

Los chats y las salas de juegos en red que hoy los menores utilizan, son los vehículos elegidos para lograr contacto con ellos e intercambiar información, como pueden ser imágenes o videos de contenido sexual. Esos documentos suelen ser utilizados como herramienta de extorsión, amenazando con ser mostradas a sus padres. Es así como los menores que sufren de ciberacoso no encuentran salida, a donde pedir ayuda y quedan atrapados dentro del acoso.

El senador Sebastián Galmarini, coautor del proyecto, destacó: “A casi un año de que el Poder Ejecutivo nacional promulgara la ley que incorporó al Código Penal el grooming, estamos muy cerca de tener en la provincia una ley orientada a la prevención del acoso sexual por Internet. Esperamos que el trámite parlamentario en Diputados sea ágil, para que el gobierno provincial instrumente cuanto antes un programa que proteja a los niños del ciberhostigamiento y que capacite a los docentes y padres para que manejen herramientas de prevención”.

El alcance de esta iniciativa incluye una fuerte articulación con organizaciones de la sociedad civil, como clubes, sociedades de fomento y ONG que trabajen en la protección de los derechos de niños, niñas y adolescentes; con establecimientos que brinden acceso público a Internet, y también con el gobierno nacional “para que se incluya en las computadoras del Programa Conectar Igualdad un filtro de contenidos y sitios web peligrosos y que advierta sobre los peligros existentes para los usuarios de Internet”, explicó Galmarini.

“Con esta media sanción, se afirma con mucha convicción el artículo 34 de la Convención sobre los Derechos del Niño, que establece que el Estado debe protegerlos contra todas las forma de explotación y abuso sexual. Nos hace creer que está vivo este artículo. Estamos muy agradecidos con los legisladores Micaela Ferraro y Sebastián Galmarini, y con el Municipio de Tigre ya que cuando golpeamos las puertas fueron los primeros que nos escucharon y caminamos juntos esta lucha, que no es más que una lucha de todos”, señaló Claudia Dominguez, madre del groomig.

Buenos Aires no es la primera provincia que trata la ley de prevención del grooming. Córdoba, Tucumán, Santa Fe son algunas de las provincias que ya cuentan con programas de prevención del ciberacoso.