Miley Cyrus, sexual: fiesta erótica en Palermo

La cantante presentó su “Bangerz Tour” en Buenos Aires ante sus miles de seguidores. Mucho baile y poses eróticas sobre el escenario para deleite de su público.

Miley Cyrus se presentó en Buenos Aires y una vez más deleitó a sus fans con su show erótico en GEBA. La cantante presentó su “Bangerz Tour” ante sus miles de seguidores.

Chica provocadora y escandalosa, Miley salió a escena en el estadio, pero dejó en su casa a la tierna Hannah Montana. “Argentina”, gritó ella ante una multitud que desató su locura en su respuesta. Luego, una seguidilla de “motherfuckers” salió de su boquita. Malla brillante para cubrir su diminuto y delgado cuerpo, gestos obscenos y canciones pegadizas para este tour que la trajo a nuestras tierras.

Cyrus es una más de las aspirantes al reinado del pop que sólo está en manos de Madonna desde hace varias décadas. La provocación es parte de su carrera, como lo hiciera la ex Chica Material y siguieran sus pasos otras como Britney Spears, Christina Aguilera, Rihanna, Katy Perry, entre tantas otras.

Gestos con sus pechos y su cola, gritos interminables y unos 20 mil seguidoras, en su mayoría chicas, que le festejaban todo. Enfrentaron la lluvia sólo para verla. Incluso acamparon para estar lo más cerca suyo.

Pero, ¿quién es Miley Cyrus? Una jovencita de un padre famoso, Billy Ray Cyrus, que se hizo conocido en el mundo de la música country con el single “Achy breaky heart”. Pero su sucesora fue por más: se ganó su lugar como chica Disney en 2006 en la serie juvenil Hannah Montana, acompañada por su progenitor en TV, y de allí no paró más.

Dejó lo angelical de lado para dedicarse puramente a la música y decidió que quería ser polémica. Se cortó el pelo, salió de noche, fue tapa de revistas y hoy provoca desde los escenarios y videoclips.

En Buenos Aires, apareció con diferentes atuendos muy coloridos junto a bailarinas y osos humanos. Rodeada de peluches y usando vinchas de colores. Un estilo juvenil que tiene muchas adeptas y algunos adeptos. Sus fans la llenaron de regalos multicolor: anteojos, gorritos, peluches.

Ella, se divertía desde las tablas de Geba con movimientos eróticos, juegos sexuales con sus bailarinas y sus ya clásicas escenas donde se toca su entrepierna (como lo hacía la Diosa Madre en los ochenta y lo sigue haciendo hasta hoy). Cyrus enfrentó la lluvia y quiso darle un poco de calor a la noche. Y lo consiguió. Deleitó a su público con su fiesta improvisada entre hits pegadizos que se corearon hasta el final.