Nueva Sala de Diálisis en el Hospital Fernández donada por la Fundación Fernández.
Con la presencia del Dr. Fernán Quirós, Ministro de Salud del Gobierno de la CABA, de la Dra. Ana María Bou Pérez, Legisladora Porteña y Presidenta de la Comisión de Salud de la Legislatura de la CABA, del Dr. Ignacio Previgliano, Director del Hospital Fernández, de miembros de la Fundación Fernández, del personal de salud del citado hospital y de invitados especiales se inauguró la Nueva Sala de Diálisis del Hospital. El proyecto consistió en la remodelación total y equipamiento a nuevo del Servicio de Diálisis del Hospital Dr. Juan A. Fernández. El costo de ejecución superó los $ 150.000.000 (ciento cincuenta millones de pesos). Fue financiado por la Fundación Fernández, gracias al generoso aporte de donantes empresariales e individuales y contó con el apoyo del Gobierno de la CABA. La obra, de 318 m2, fue realizada durante seis meses ininterrumpidos de trabajo (diciembre 2022 – junio 2023) y cumplió con su objetivo de dotar al Hospital Fernández de una nueva Sala de Diálisis, equipada y acondicionada de acuerdo con los últimos avances tecnológicos. Está conformada por distintas áreas: de hemodiálisis con enfermería central, de procedimientos, de diálisis para aislados, de diálisis peritoneal, dormitorio y estar del personal, dormitorio de guardia, oficinas administrativas, sanitarios y depósitos. Incluye instalaciones eléctricas, termomecánicas, de gases médicos y equipamiento total. Cabe resaltar que el Servicio de Diálisis del Hospital es vital para la vida del hospital, ya que recibe más de 9000 pacientes por año, quienes pasan miles de horas en la sala, debido a las distintas modalidades de tratamiento que reciben.
La diálisis es un procedimiento médico que se utiliza para realizar funciones de filtración y eliminación de desechos y líquidos no deseados del cuerpo cuando los riñones no pueden hacerlo de manera eficiente. Esta técnica es comúnmente utilizada en pacientes con enfermedad renal crónica o insuficiencia renal.
Existen dos tipos principales de diálisis:
Diálisis peritoneal: En este método, se utiliza el revestimiento del abdomen, llamado peritoneo, como una membrana natural para filtrar los desechos y el exceso de líquido. Se introduce un líquido especial, llamado líquido de diálisis, a través de un catéter en la cavidad abdominal. El líquido permanece en el abdomen por un período de tiempo determinado, permitiendo que los productos de desecho y el exceso de líquido sean eliminados a través de un proceso de difusión y osmosis. Luego, el líquido de diálisis se drena y se reemplaza con un nuevo lote de líquido fresco.
Hemodiálisis: En este tipo de diálisis, la sangre del paciente se extrae a través de un acceso vascular, generalmente un catéter o una fístula arteriovenosa, y se dirige a una máquina de diálisis. En la máquina, la sangre pasa a través de un filtro especial llamado dializador, donde se lleva a cabo el proceso de filtración y eliminación de los productos de desecho y el exceso de líquido. Luego, la sangre filtrada se devuelve al cuerpo a través del acceso vascular.
Ambos tipos de diálisis tienen como objetivo principal reemplazar la función renal deteriorada y mejorar la calidad de vida de los pacientes con insuficiencia renal. Sin embargo, es importante tener en cuenta que la diálisis es un tratamiento de por vida y requiere de una estricta adherencia al plan de tratamiento recomendado por el equipo médico.
Además, es fundamental que los pacientes en diálisis sigan una dieta y un régimen de medicamentos específicos, así como realicen controles médicos periódicos para monitorear su estado de salud y ajustar el tratamiento según sea necesario.
En algunos casos, la diálisis puede ser un paso previo al trasplante renal, ya que puede servir como un puente hasta que se encuentre un donante adecuado y se realice el trasplante.
Es importante destacar que la información proporcionada aquí es solo una descripción general de la diálisis y que cada paciente puede tener situaciones y necesidades individuales. Por lo tanto, es fundamental consultar a un médico especialista en nefrología para obtener un diagnóstico adecuado y un plan de tratamiento personalizado.