Un total de 550 agentes de la Policía Metropolitana se desplegarán por toda la red de subterráneos desde esta semana. De momento, se complementarán con oficiales de la Policía Federal y de seguridad privada.
No obstante su retiro progresivo, algunos agentes federales ya han sido notificados de que sus servicios no serán requeridos a partir de este mes de junio, tal como anticipó este medio en febrero pasado.
A los mismos se les recomendó solicitar adicionales en las líneas de ferrocarriles metropolitanos. En diálogo con este medio, un agente de la PFA manifestó: «siento que no valoran el esfuerzo de los uniformados de bien que tratamos de ayudar a los compañeros de Metrovias ni a los pasajeros».
La incorporación de los agentes de la Policía Metropolitana al Subte fue prometida en reiteradas oportunidades. La primera vez fue entre noviembre y diciembre, cuando se anunciaron 500 efectivos. Tras fallar este intento, hubo un segundo anuncio hacia fines de enero con la promesa de sumar 350 agentes a la custodia de la red y un tercero en febrero que involucraba 650 policías.
Hasta el momento, unos 800 uniformados de la Policía Federal son los encargados de custodiar el Subte y el Premetro. Sus salarios adicionales son afrontados por el Gobierno de la Ciudad. Desde el GCBA y SBASE apuestan a la continuidad de una buena parte de estos efectivos, ya que -de acuerdo a estimaciones oficiales- se necesitan entre 1200 y 1600 para custodiar toda la red. Una cifra que, por ahora, aparece lejana.
