Oscar Martínez ganó la prestigiosa «Copa Volpi» a mejor actor por su rol en El Ciudadano Ilustre.

La película también fue galardonada con el Premio del Jurado «Giovani Giurati del Vittorio Veneto Film Festival». La película había sido ovacionada de pie por el público en su presentación en el Festival, el pasado domingo 4 de septiembre. En su discurso de agradecimiento, Oscar Martínez dijo “Es una altísima distinción y me honra muchísimo. Agradezco a los directores Gastón Duprat y Mariano Cohn por haber creído en mí para este hermoso rol del Premio Nobel Daniel Mantovani».

Buenos Aires, 10 de septiembre de 2016 – En la noche del sábado se llevó a cabo la ceremonia de premiación y cierre de uno de los Festivales más prestigiosos del mundo. En la Sala Dársena, se entregaron los premios León de Oro a mejor película y Copa Volpi a mejor actor, galardón que se llevó Oscar Martínez por su destacado protagónico en El Ciudadano Ilustre.

“Es una altísima distinción y me honra muchísimo. Basta ver la lista de nombres de quienes lo han ganado como para sentirse muy alagado y emocionado por este premio”, explicó el actor argentino.
“Aparte de ser el Festival más antiguo de Europa y, junto con Cannes, el más prestigioso, ocurre en Italia que fue la cuna de los más grandes cineastas del Siglo XX. Amé el cine italiano, el neorrealismo italiano, a la increíble constelación de directores, actores, actrices y guionistas que tuvieron durante décadas en este país”, afirmó Oscar tras recibir el prestigioso galardón por su papel en El Ciudadano Ilustre que se estrenó este jueves en nuestro país con una gran convocatoria del público en las diferentes salas en toda Argentina. (Audio adjunto). Previo a este galardon el film de Mariano Cohn y Gaston Duprat se quedó con el premio del Jurado Joven.

Oscar Martínez es uno de los mejores actores de nuestro país, con una trayectoria de más de 40 años en cine, teatro y televisión. Es autor y director de teatro, además de protagonista de muchos de los últimos éxitos del cine nacional. Y ahora se suma a las destacadas figuras que han sido distinguidas con el premio Copa Volpi como Brad Pitt, Ben Affleck, Javier Bardem, Michel Fassbender, Sean Penn, Liam Nesson, Jack Lemmon, Marcelo Mastroianni, Massimo Troisi, Hugh Grant, Gerard Depardieu, Phillip Semour Hoffman entre otros.

El Ciudadano Ilustre, única representante Argentina en competencia oficial del 73° Festival de Cine de Venecia, el pasado domingo 4 de septiembre se presentó con gran éxito en la muestra con la presencia de su protagonista Oscar Martínez, Andrea Frigerio, sus directores Gastón Duprat y Mariano Cohn, su guionista Andres Duprat y el productor Fernando Sokolowicz. El film que participó dentro de las 20 seleccionadas, compitiendo con los nuevos títulos de grandes directores como Wim Wenders, Terrence Malick, François Ozon, Tom Ford, Damien Chazelle, entre otros.

Producida por Arco Libre – Televisión Abierta – Magma Cine – A Contracorriente Films, en asociación con Aleph Media, con el apoyo de Televisión Española, Fox, Canal 13, Penguin Random House y Clarin.
El jurado de la selección oficial estuvo presidido por Sam Mendes (American Beauty, Camino a la perdición, Skyfall) y secundado por figuras como la artista, cantante y cineasta Laurie Anderson (Heart of Dog, Home of the Brave, y la actriz Ciara Mastroianni (Ma maison préférée, Trois Coeurs).

EL CIUDADANO ILUSTRE narra la historia de Daniel Mantovani un escritor argentino que vive en Europa desde hace más de tres décadas, consagrado mundialmente por haber obtenido el premio Nobel de literatura. Sus novelas se caracterizan por retratar la vida en Salas, un pequeño pueblo de Argentina en el que nació y al que no ha regresado desde que era un joven con aspiraciones de escritor.
Entre la numerosa correspondencia que recibe diariamente le llega una carta de la municipalidad de Salas en la que lo invitan a recibir el máximo reconocimiento del pueblo: la medalla de Ciudadano ilustre. Sorprendentemente, y a pesar de sus importantes obligaciones y compromisos, Daniel decide aceptar la propuesta y regresar de incógnito por unos pocos días a su pueblo.
El viaje tendrá para Daniel múltiples aristas: será el regreso triunfal al pueblo que lo vio nacer, un viaje al pasado en el que se reencontrará con viejos amigos, amores y paisajes de juventud, pero sobre todo será un viaje al corazón mismo de su literatura, a la fuente de sus creaciones e inspiración. Una vez allí, el escritor constatará tanto las afinidades que aún lo unen a Salas como las insalvables diferencias que lo transformarán rápidamente en un elemento extraño y perturbador para la vida del pueblo.
La calidez pueblerina desaparece al mismo tiempo que las controversias se multiplican, llegando a un punto sin retorno que revela dos formas irreconciliables de ver el mundo.