Pasaje Voltaire de la Ciudad de Buenos Aires

Pasaje Voltaire de la Ciudad de Buenos Aires.

Pasaje Voltaire de la Ciudad de Buenos Aires

En esta nota presentamos los naranjos amargos del Pasaje Voltaire.

Los pasajes configuran ámbitos singulares dentro de la trama urbana de Buenos Aires. Muchos de ellos se constituyeron en lugares de gran riqueza espacial en el que se conjuga escala, perspectiva y homogeneidad, con un menor flujo de circulación. Aquellos que en su origen rompieron con el ritmo de calles y edificaciones y se convirtieron en excepciones a una trama bastante rigurosa, aún cuando algunos son de acceso público, a menudo son descubiertos ocasionalmente a partir de algún error en el recorrido habitual. Los que se conformaron al interior de una parcela, quedan bajo la órbita exclusiva de los vecinos que los habitan y algunos pocos visitantes ocasionales.

Pasaje Voltaire de la Ciudad de Buenos Aires
Pasaje Voltaire de la Ciudad de Buenos Aires

Pasajes de la Ciudad de Buenos Aires

Pasadizos arbolados en medio de manzanas densamente edificadas; viviendas señoriales de varios patios que abandonan su destino de origen y pasan a convertirse en conventillos, o galerías comerciales, o departamentos, enriquecen aún más el panorama, ya de por sí basto.

Pasaje Voltaire de la Ciudad de Buenos Aires
Pasaje Voltaire de la Ciudad de Buenos Aires

El Arbolado Público Urbano es un componente crucial del ecosistema urbano.

En esta nota presentamos los naranjos amargos del Pasaje Voltaire. Lo caracterizan los árboles frutales, de bergamota, limones, naranjas y mandarinas. Una calle muy tranquila al lado del ruidoso Palermo. El pasaje debe su nombre a la ordenanza del 30 de octubre de 1914, en homenaje a Voltaire, poeta del siglo de Luis XV, Ensayo sobre las costumbres y el espíritu de las naciones, Diccionario filosófico y Cándido, entre otras obras.

Entre los detalles que llaman la atención en el primer tramo del pasaje Voltaire hasta Ravignani es el colorido que presentan las casas, que van del blanco, negro, azul, amarillo y rosa.

Pasaje Voltaire de la Ciudad de Buenos Aires
Pasaje Voltaire de la Ciudad de Buenos Aires

Presta servicios ambientales imprescindibles, como la producción de oxígeno, la absorción de dióxido de carbono (gas que aporta al efecto invernadero), intercepción de contaminantes, retención de particulados, retención de agua de lluvia y morigeración de temperaturas extremas, entre otros.

En este marco el naranjo amargo es un árbol que no está incluido en El Plan Maestro de Arbolado Público de la Ciudad de Buenos Aires. La ley 363 artículo 6 excluye a este hermoso frutal.

El pasaje Voltaire tiene tan solo dos cuadras, en el pintoresco barrio de Palermo hollywood. Es sencillamente encantador, arbolado, con casas coloniales y edificaciones que superan los 70 años, Voltaire corre a lo largo de dos cuadras entre las calles Arévalo y Carranza, y es cortada por Emilio Ravignani.

Pasaje Voltaire, único de Palermo Hollywood.

Pasaje Voltaire de la Ciudad de Buenos Aires

El naranjo amargo

El naranjo amargo proviene del sur de Asia, y se extendió al Mediterráneo, Siria y Palestina por los árabes. Fueron los califas de Córdoba, durante los siglos IX y X quienes popularizaron su uso como planta ornamental, plantandolo en calles, jardines, patios y mezquitas. Es muy habitual verlo todavía en zonas de Andalucía, como el famoso Patio de los Naranjos de la Mezquita de Córdoba.

 Voltaire

François -Marie Arouet París, 21 de noviembre de 1694- , 30 de mayo de 1778, más conocido como Voltaire, fue un escritor, historiador, filósofo y abogado francés que figura como uno de los principales representantes de la Ilustración, un período que enfatizó el poder de la razón humana, de la ciencia y el respeto hacia la humanidad. En 1746 Voltaire fue elegido miembro de la Academia francesa en la que ocupó el asiento número 33.

LINKS INTERESANTES

Pizza con Champagne
El Ajo
Bife de Chorizo Mariposa
Canelones

VINOS

Cabernet Sauvignon
Torrontes el Blanco de Palermo
El Malbec de Palermo