Patio de Honor ó Patio de las Palmeras: La vieja palmera Yatay fué oferta “inadmisible” ya no está

Este fin de semana fue cortada y retirada porque su permanencia amenazaba la seguridad. Es que el ingreso obligatorio a la sede presidencial es justamente atravesando el Patio de las Palmeras.

La vieja palmera Yatay que vivió en la Rosada durante 117 años el Patio principal de la Casa Rosada ya no está. En el marco del proceso de compra 23-0069-CDI17 “Servicio de provisión de UNA (1) de palmera butay yatay con destino a la Casa de Gobierno”. El proceso de compra de la palmera se dejó sin efecto por oferta “inadmisible”. Butia yatay es una especie de la familia de las palmeras (Arecaceae). Es la palmera más alta del género Butia. Es una palmera de hasta 12 m de altura. Muestra hojas pinadas, con 140 hojuelas, de color verde ligeramente azulado, de hasta 2 m de largo con un pecíolo de 60 cm, subleñoso y dotado de espinas. Las flores forman inflorescencias de color amarillo, que pueden contener hasta 100 floros protegidos por una espata leñosa y acanalada. El fruto aparece arracimado; es aovado, apicado, de color anaranjado y entre 5 y 3 cm de diámetro, protegido en la base por brácteas que cubren un tercio de su superficie. Sus frutos son comestibles y de estos se elabora el «licor de yatay»,

La ubicación espacial de este patio coincide con la antigua Casa de los Virreyes o Palacio Real, edificio que fue utilizado incluso por los primeros presidentes. La idea de reemplazar la vieja construcción por un patio abierto le permitió al arquitecto Tamburini crear un pulmón a cielo abierto en torno al cual se ubican distintas dependencias de la Casa.

Se lo conoce también como “Patio de las Palmeras” debido a las cuatro palmeras Yatay pertenecientes a nuestra flora autóctona que lo ornamentan y que fueron plantadas en 1904. Este árbol era común en el Buenos Aires del siglo XIX.

Es de estilo ecléctico como todo el edificio. Presenta líneas italianizantes, especialmente en el ala norte y en el sector presidencial. En la planta baja y en el primer piso, está recorrido por galerías perimetrales en cuyas paredes y cielorrasos se observan pinturas decorativas.

En el centro, está emplazada una artística fuente de hierro rodeada por un cantero con guarda perimetral en forma de festón de mármol de Carrara blanco con veta gris. En este cantero, se encuentran dos copones de origen francés que, al igual que la fuente, fueron encargados a la Fundición de Arte de Val D’Osne.

El piso del patio y las galerías era de gres inglés (en cerámica esmaltada inglesa) con figuras geométricas de varios colores y baldosas lisas combinadas en dos tonos. Sin embargo, debido a su desgaste, el piso original fue reemplazado por baldosas fabricadas especialmente en Italia con idéntico diseño.

En abril de 2012, se descubrieron, en los triángulos laterales a las columnas de los arcos que integran el patio, murales alegóricos que no podían apreciarse en ese momento. Estaban cubiertos por capas de pintura y revoque. La primera imagen que salió a la luz representa a una gárgola con decoraciones de borlas con pequeñas rayas. La superficie total de la figura estaba pintada al fresco cementicio de color tierra siena natural. Estas alegorías forman parte del imaginario popular neorrealista grotesco de fines del siglo XIX a principios del XX. Se presume que estos murales fueron realizados para los preparativos del festejo del Centenario de la Revolución de Mayo.