El vicepresidente 1º de la Legislatura, Cristian Ritondo, rechazó las declaraciones de Jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, respecto que al Gobierno de la Nación «no le compete» la «responsabilidad primaria» de la seguridad.
Ritondo dijo que «Capitanich es un irresponsable que perdió el sentido común y tiene alucinaciones». Como hombre político no puede desconocer lo que establece el artículo 99 de la Constitución Nacional que en su inciso 1 señala que la presidente es el jefe supremo de la Nación y responsable político de la administración general del país y en su inciso 12 dice que es la comandante en jefe de todas las fuerzas armadas de la Nación».
Para Ritondo Capitanich incurre en una «violación de los deberes de funcionario público» porque no sólo oculta los datos de la pobreza sino que ahora también se niega a hablar de la seguridad, mientras aumentan los hechos de inseguridad en nuestra ciudad y en todo el país. Ofenden a la gente cuando dicen que bajó el índice de criminalidad. Ocultan las denuncias por delitos para hacer el INDEC de la seguridad».
Ritondo dijo que «es una vergüenza y una tomadura de pelo que Capitanich esconda las cifras y las denuncias, para hacer de las estadísticas de seguridad, lo mismo que vienen ocultando con la inflación y los índices de pobreza».
“El Dolor y la impunidad ataca una y otra vez. ¿Y cuál es la respuesta? la incontinencias verbales de Capitanich y la ausencia de la Ministra María Cecilia Rodríguez, ambos responsables de la Seguridad de todos los argentinos. Siguen jugando al “don pirulero”, atendiendo cada uno su propio juego con el relato de que la inseguridad es sólo una sensación y culpa de los medios».
Haciéndose eco del documento de la Iglesia Ritondo dijo «Argentina enferma de violencia» y agregó «sorprende la inacción del Gobierno. Sino pueden hacerse cargo de la seguridad de los porteños le pedimos por favor por décima quinta vez que nos traspasen a la Policía Federal, que cumpla con la ley aprobada en el 2007, porque nosotros si sabemos que hacer con los que están al margen de la ley».
