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Rodrigazo en cuotas.

Rodrigazo en cuotas. Juntos por el Cambio detrás de la corrida cambiaria.

Lo más preocupante de esto es que como pasó con el Rodrigazo los precios de los regulados empiezan a acumular desequilibrios muy grandes en un corto período de tiempo. Con infla corriendo 8% y regulados moviendose a la mitad de esa velocidad de acá a fin de año es una bomba


El Rodrigazo fue un conjunto de medidas económicas implementadas por el gobierno argentino en 1975 durante la presidencia de Isabel Perón y la gestión del Ministro de Economía Celestino Rodrigo. Estas medidas tuvieron como objetivo reducir el déficit fiscal y controlar la inflación, que había alcanzado niveles muy altos en ese momento.

Entre las medidas que se tomaron se incluyó la devaluación del peso argentino en un 100%, la reducción de los subsidios y la eliminación de las tarifas congeladas en los servicios públicos, y la eliminación de la indexación salarial. Además, se impusieron restricciones a la importación de bienes y se aumentaron las tasas de interés.

El Rodrigazo tuvo un impacto significativo en la economía y la sociedad argentina, ya que llevó a una fuerte recesión económica y a un aumento en los precios y el desempleo. Las protestas populares y los disturbios sociales siguieron a la implementación de estas medidas, lo que llevó a la renuncia del ministro de Economía Celestino Rodrigo y a un cambio en la política económica del gobierno argentino.

Rodrigazo. Solo se benefician los chetos de Punta del Este y Miami

Una devaluación brusca puede tener varios efectos en la economía de un país como Argentina. A continuación, se describen algunos de los efectos más comunes:

Aumento de los precios: Una devaluación brusca suele generar un aumento de los precios de los bienes y servicios, especialmente de aquellos que son importados o que dependen de insumos importados. Esto puede generar inflación y afectar el poder adquisitivo de las personas.

Reducción del consumo: El aumento de los precios puede reducir el consumo de bienes y servicios, lo que puede afectar la demanda y la producción de las empresas.

Aumento de la pobreza: La devaluación brusca puede generar un aumento de la pobreza, ya que el aumento de los precios afecta especialmente a los sectores más vulnerables de la sociedad, que tienen menos capacidad de compra.

Aumento de las exportaciones: La devaluación brusca puede generar un aumento de las exportaciones, ya que los productos del país se vuelven más baratos en los mercados internacionales. Esto puede beneficiar a las empresas exportadoras.

Aumento del endeudamiento: Si un país tiene deudas en moneda extranjera, una devaluación brusca puede aumentar su endeudamiento, ya que la devaluación aumenta el valor de la deuda en moneda local.

En cuanto a qué empresas se benefician, esto puede depender de varios factores, como el tipo de empresa y el sector en el que se desempeña. En general, las empresas que exportan pueden beneficiarse de una devaluación brusca, ya que sus productos se vuelven más competitivos en los mercados internacionales. Por otro lado, las empresas que dependen de insumos importados o que tienen deudas en moneda extranjera pueden verse afectadas negativamente por una devaluación brusca.

Privados en ganancias pero estatales en la deuda
¿Por que los economistas ortodoxos nacionalizan las deudas privadas?

La nacionalización de las deudas privadas es una medida extraordinaria que se ha utilizado en algunos casos excepcionales, como en la crisis financiera de 2008, cuando algunos países nacionalizaron los bancos para evitar su quiebra y el colapso del sistema financiero. Esta medida no fue respaldada por todos los economistas ortodoxos, ya que implica la intervención estatal en el sector privado y puede generar distorsiones en el mercado.

Es importante destacar que la nacionalización de las deudas privadas no es una solución a largo plazo para los problemas económicos y financieros de un país. Si bien puede evitar la quiebra de empresas y bancos en el corto plazo, también puede generar problemas de eficiencia y asignación de recursos, ya que los incentivos para la gestión eficiente y la rentabilidad son menores en el sector público que en el privado.

En resumen, la nacionalización de las deudas privadas no es una medida que los economistas ortodoxos defiendan de manera general, ya que va en contra de los principios de libre mercado y propiedad privada que sostienen.