Tendencias en materia de seguridad residencial

Por Ricardo Katz, Presidente Prioridad 1,www.prioridad1.com

Hoy en día y de acuerdo a la tecnología disponible se están imponiendo en materia de seguridad los sistemas cada vez más integrados como los de doble acceso, con servicios en los que se le brinda al cliente desde la propia alarma hasta imágenes, constituyendo una red de seguridad completa para una residencia.

Siempre adecuándolo a la necesidad de cada hogar, un sistema de alarma normalmente consta de censores y un teclado desde donde el usuario activa y desactiva la alarma. Las alarmas más avanzadas ya cuentan con teclados que no son los tradicionales con las teclas usuales, sino que se presentan con pantallas soft touch.

Este tipo de pantallas inteligentes permiten no sólo hacer funcionar la alarma como estamos habituados, sino que también puede mostrar el plano de la casa, indicar la ubicación del censor que se ha disparado, es decir, existe un vínculo con el cliente mucho más exacto, más amigable. En fin, empieza a integrarse información de distinto tipo, que antes estaba sólo restringida a las computadoras.

A su vez, las alarmas pueden ya disponer de detectores más avanzados llamados detectores infrarrojos pasivos, por ejemplo, que evitan el disparo de la alarma ante el movimiento de un animal doméstico.
¿Cómo funcionan? Estos detectores no sólo permiten movimiento sin restricción a los animales, en zonas residenciales, también disminuyen las falsas alarmas causadas por pequeños roedores y pájaros. Algunos modelos incorporan un microprocesador capaz de discriminar si la señal recibida dentro de su campo de acción pertenece a un humano o un animal, sin comprometer la habilidad del dispositivo de descubrir a los intrusos.

¿En qué consiste un sistema integrado de seguridad?

Si entramos a una casa protegida por un sistema de seguridad de última tecnología, entonces cuando la persona llega a su casa, en lugar de sacar su llave va a disponer de un pequeño control remoto. Este control remoto puede utilizarlo para desactivar la alarma con uno de sus botones, o bien otra de las funciones, es acercar ese control remoto que oficia de tarjeta de acceso de control de accesos inalámbrica. Sólo se lo acerca a un lector disimulado ya que no hay puerta, de modo que la alarma identifica a este detector, a este control de accesos, y sabe que se trata de la persona correcta y entonces desactiva la alarma para que el usuario no tenga que hacerlo manualmente.

Es decir que ya estamos integrando el control de acceso, que permite abrir la puerta con determinadas cerraduras que no son las cerraduras eléctricas a las que estamos habituados, sino que son cerraduras de seguridad que se llaman magnéticas o cerraduras eléctricas especiales. Entonces, con este control remoto o bien este código de control de accesos se desactiva la alarma y además se abre una puerta, pero que fue cerrada convenientemente, con seguridad.

En una casa que tiene la última tecnología, el dueño cuenta con una serie de cámaras que están observando en forma permanente y grabando en forma digital dentro de su casa. Se trata de una serie de cámaras distribuidas que le permiten observar tanto el exterior, el frente, como los fondos, o sea que puede estar controlando su propiedad. Puede estar mirando desde su televisor en cualquier momento cualquiera de sus cámaras de modo que si hubiera alguna alarma antes de desactivarla al sistema, él puede estar observando qué es lo que ocurre en esos ámbitos y estar seguro que no va a cometer un error en caso de salir o desactivar la alarma.

En definitiva, actualmente en un sistema de seguridad se está integrando no solamente la alarma sino la observación más el control de accesos. Esto es un conjunto que empieza a sumar posibilidades: por un lado, comodidad; por otro lado, tranquilidad. También obviamente esta misma situación se puede hacer en forma remota, es decir, el cliente podría estar mirando su casa desde su celular en cualquier momento, de modo que, en caso que también alguien lo llame porque la alarma se ha activado, por ejemplo desde el centro de monitoreo, podría informarle que hay una anormalidad, y el cliente puede mirarlo en el mismo momento que se lo están informando con el fin de interpretar que está sucediendo. Podría ser un error, podría ser que un integrante de la familia ingresó y se olvidó la clave, como podría ser también una verdadera intrusión.

En este sentido, -y este es el aspecto de mayor seguridad también que da el tema de las cámaras- uno puede confirmar antes de enviar a la policía o la vigilancia, qué es lo que está pasando ante un evento.

Es importante conocer que un sistema de seguridad permite distintas alternativas. Hoy no es un servicio restringido como hace años atrás. Actualmente el cliente puede elegir las condiciones o las formas de operación. Es más, puede implementar algunos servicios hoy y otros más adelante. Lo que sí hay que tener en cuenta, en el momento de iniciar la decisión de un sistema de seguridad, es que si va a querer crecer con el sistema y mejorarlo, tiene que tener una plataforma de base, convenientemente armada como para que le permita ese crecimiento.

Un cliente puede optar por un sistema muy básico, como disponer de una sola cámara de grabación que es más económica. Se llaman cámaras IP y son cámaras conectadas a Internet, que se colocan a un router o cualquier sistema de banda ancha y permite ver pero no permite grabar, o bien, permite grabar bajo determinadas condiciones.

Si se desea a futuro un sistema de seguridad un poco más elaborado, ya hay que pedirlo con cierta previsión, de manera que el sistema tanto de alarmas como de imágenes nos permita acomodarnos hacia adelante.

Detectores exteriores

Cada vez son más los usuarios de casas que están empezando a pedir el sistema de detectores exteriores debido a la necesidad de detectar más tempranamente una intrusión.

Los detectores de exterior se usan justamente como medio de detección, digamos primario, perimetral podríamos decir, de modo que ante la sola intrusión a un jardín y sin haber llegado al domicilio en sí mismo, se tiene un aviso previo.

El sólo hecho de poner detectores de estas características brinda un tiempo muy valioso, por varios motivos:

1) Es sorpresivo para el intruso
2) Si uno le agrega además las cámaras con iluminación automática (censores de movimiento iluminan el sitio), ya genera un doble impacto porque habrá una sirena sonando y habrá una luz que se enciende automáticamente, el intruso se verá sometido a tener que irse. No sólo porque está expuesto a la vista de todos sino porque además uno lo está observando también e instantáneamente llamará a la policía. Cuando la compañía de monitoreo llame al lugar a los efectos de chequear qué está pasando, si la empresa de monitoreo no tiene la imagen y uno sí, se pedirá auxilio al instante o se avisará que no se necesita ayuda.

Este es un medio cada vez más importante y la complementación con las cámaras también es muy valiosa. No hay una única tecnología que resuelva todo, esto es una sumatoria de cosas que integradas incrementarán nuestra seguridad. La seguridad no es un solo producto, un solo servicio, sino que es una combinación de factores, incluido el cuidado de la persona que cuenta con un sistema de seguridad porque también está el error humano involucrado en este proceso. Uno en su propia casa tiene que tomar los mismos recaudos que toma cuando se encuentra fuera de ella. Si se está por salir de casa y el monitor está apagado y por el apuro el cliente no mira al salir, por más equipados que estemos en tecnología de seguridad, es fundamental nuestra actitud para contribuir a que el sistema funcione y no convertirlo en vulnerable.
Es necesario estar prevenidos y tomar todos los recaudos que estén a nuestro alcance porque la comodidad atenta contra la seguridad.