Un estudio de la ONU reveló que una de cada 200 personas en el mundo es adicta a las drogas

El trabajo reveló además que 230 millones de personas las consumieron por lo menos una vez en 2010. El documento fue dado a conocer ante la ONU en el Día Internacional de la lucha contra las drogas ilícitas.

Más allá de los adictos, las estadísticas revelan que unos 230 millones de personas, es decir, aproximadamente una de cada 20, consumieron drogas ilícitas por lo menos una vez en 2010.

El estudio señala que durante las últimas décadas, la renta disponible, en particular en la generación más joven en los países desarrollados, ha aumentado significativamente, lo que facilitó el aumento del consumo de drogas.

El consumo es generalmente más elevados en los países desarrollados, donde la renta disponible es alta. Este efecto puede observarse, a veces, dentro de las regiones, subregiones o incluso dentro de los países.

En América del Norte, el consumo es mayor en Canadá y en los Estados Unidos, que en México. En América del Sur, el uso de drogas es mayor en el Cono Sur. En Brasil, el consumo de drogas está más difundido en la región sur, la más rica. En Europa, es mayor en Europa Occidental, que en el Este o en el Sudeste.

Varios países también informaron que los desempleados tienen más probabilidades de estar involucrados en el tráfico de drogas que los que gozan de un empleo formal.

En Polonia, por ejemplo, en 2009 el 30% de las personas detenidas por el tráfico de drogas estaban desempleadas, cuando la tasa de desempleo era del 8,2%. En Italia, no tenía trabajo el 38% de los traficantes detenidos, en medio de un desempleo general del 7,8%. En la Argentina, el 54%, para una desocupación de 8,6% ese año.

El director ejecutivo de la Unodc, Yuri Fedotov, dijo hoy, al presentar el informe, que «la lucha contra la delincuencia organizada transnacional y las drogas ilícitas debe formar parte integral del programa de desarrollo».

«Las bandas internacionales actúan como empresas internacionales, mueven miles de millones y tienen una enorme influencia en la política», advirtió.

El dirigente subrayó que «las drogas ilícitas alimentan la delincuencia y la inseguridad al tiempo que socavan los derechos humanos y plantean riesgos considerables para la salud pública».

“La heroína, la cocaína y otras drogas siguen matando a unas 200.000 personas al año, destruyen familias y causan sufrimiento a otros miles de personas, crean inseguridad y contribuyen a la propagación del VIH”, señaló Fedotov.

Recogió luego la advertencia del secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, de que los crímenes por las drogas amenazan los objetivos de garantizar un desarrollo sostenible y luchar contra el hambre y la pobreza.

«Ninguna región, ningún país, por poderoso que sea, quedará exento de ello», dijo Fedotov.

El informe también alerta sobre las devastadoras consecuencias directas del consumo de drogas e incluso de algunas sustancias permitidas, como bebidas alcohólicas, cigarrillos y ciertos fármacos.

«Cada año mueren 200.000 personas en todo el mundo como consecuencia del consumo de drogas ilegales; por alcohol mueren 2,3 millones y 5,1 millones por consumo de tabaco», apuntó. «Las drogas destruyen familias y minan culturas enteras».