Diputada carancho: la visita de Lemoine a Moreno y el rechazo vecinal
Con un aire de epopeya malograda, Lilia Lemoine se hizo presente en una marcha por el asesinato de un delivery en Moreno, pero el vecindario, curtido en broncas, le dio la espalda. La legisladora intentó mostrarse solidaria, aunque terminó grabando un video en el que se llevó más insultos que aplausos. Tiempo de lectura: 5 minutos.
Un barrio enardecido y una diputada en la tormenta
Las calles de Moreno, esa geografía donde la realidad golpea más que la retórica política, fueron el escenario de un nuevo capítulo de desencuentro entre la dirigencia y el pueblo. Lilia Lemoine, diputada nacional por La Libertad Avanza, decidió asistir a la marcha en honor a Lucas Aguilar, el joven delivery asesinado de siete puñaladas. Lo que parecía una estrategia de acercamiento a la gente, terminó en un boomerang de rechazos y gritos que resonaron como un tango mal tocado.
Cargaba un cartel con la cara de la víctima, pero la marea vecinal no se conmovió. «¡Que se vaya, que se vaya!», corearon los presentes, dejando en claro que su presencia no sumaba sino que restaba. Hay momentos en que la política llega tarde y, cuando intenta recuperar el tiempo perdido, la calle le recuerda que hay heridas que no se cierran con gestos oportunistas.
Redes, bronca y un show inesperado
Lemoine, con reflejos rápidos pero poco tino, encendió la cámara y transmitió en vivo desde Instagram. Ahí, en medio del tumulto, los gritos contra la intendenta Mariel Fernández se mezclaron con los reclamos de seguridad. «¡Mariel hija de puta!», entonaron algunos, en un coro de furia más que de esperanza.
La legisladora, lejos de asumir el rechazo, intentó acomodar el relato. «Todos los diputados deberían estar presentes para dar visibilidad a los reclamos», dijo ante la cámara, aunque la escena no la favorecía. La política del show digital tiene sus límites cuando el guion se desarma en vivo y en directo.
Filosofía, oportunismo y la justicia que no llega
Si Aristóteles hablaba de la virtud como el punto medio entre dos extremos, aquí no hubo equilibrio alguno: ni la diputada encontró el tono adecuado ni los vecinos estuvieron dispuestos a tolerar su visita. ¿Se trató de un acto sincero o de un intento de capitalizar la tragedia para cosechar likes? Nietzsche diría que la política contemporánea se asemeja más a un espectáculo que a una verdadera lucha por la justicia.
Palermo Online Noticias: juez, fiscal y jurado
En un país donde la seguridad se ha convertido en moneda de cambio electoral, la escena de Lemoine en Moreno deja más preguntas que respuestas. ¿Qué rol deben asumir los dirigentes en estos contextos? ¿Cómo se equilibra la presencia política sin caer en la demagogia?
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