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Remedios orgánicos: combatí el resfrío con ajo y agua

La naturaleza es sabia y una fuente inagotable de remedios naturales. En el mes de otoño, tiempo de resfríos y dolores de garganta, hay alimentos que se convierten en grandes aliados para cuidar la salud.
Y uno de ellos es el ajo.

Por eso quería compartir con nuestros lectores unos consejos y tips súper útiles

Ideales para leer, incorporar y poner en práctica, si nos toca pasar por un resfriado.

El ajo, un gran aliado

Este remedio es tan viejo como efectivo, es la cosa más simple para prevenir resfríos que heredé de mi abuelo, quien aunque no lo crean se comía un diente de ajo picado, sobre un trozo de pan de centeno todos los días y decía que era su secreto para alejar todo tipo de virus y bacterias.

Este remedio lo tomo sólo en casos especiales y definitivamente si no tengo una cita o cena romántica en puerta, porque el olor puede ser bastante intenso. Aun así, creo que vale la pena intentarlo si se sienten con las defensas bajas, a punto de engriparse o si tienen un resfrío, ya que de esta manera se curarán más rápidamente.

Es importante saber que el ajo es un bactericida, fungicida y anti viral natural. Tiene vitamina C y alicina, un fitoquímico que se libera cuando el ajo es machacado o picado y se consume crudo.
Ha sido usado por diferentes culturas para ayudar a curar infecciones, sinusitis, asma o intoxicación por alimentos; reduce el colesterol en la sangre, combate las células cancerígenas y es el antibiótico más potente que hay en la naturaleza.

¿Ajo. Cómo consumirlo?

Pelar un diente de ajo y picarlo muy finamente. Agregarlo a 1/4 de vaso con agua y tomarlo SIN masticarlo, ni mantenerlo en la boca. Tragarlo lo más rápido posible y no tomar más agua por un rato porque se pueden sentir náuseas. Si quedó algún gusto feo en la boca se irá de inmediato un par de segundos después de consumirlo.

Algunas recomendaciones importantes son:

– NO lo hagas en ayunas, porque repetirás el ajo todo el día y es una sensación muy desagradable.
– Puedes tomarlo una o dos veces al día, por 3 días. Si no mejoras y te sientes peor, seguramente necesitarás más tratamientos, aunque el ajo es un remedio natural que no tiene contraindicaciones.
– Puedes dárselo a niños mayores de 4 años, pero sólo medio diente de ajo. Recuerda insistirles en que no lo mastiquen.
– El ajo debe guardarse en la parte baja de la heladera. Hay que acostumbrarse a dejarlo siempre allí , ya que se conservarán mejor sus nutrientes y propiedades.
– Recordá que estas son solo recomendaciones y cada cuerpo funciona diferente, en algunos cuerpos sensibles a los ingredientes del ajo, se puede generar cierta irritación. Puedes suspender su ingesta si sientes que no te cae bien, siempre escuchá a tu cuerpo.
– En caso de dudas, no dejes de consultar con tu médico.

El ajo y el agua son dos remedios naturales que se pueden utilizar para aliviar los síntomas del resfriado. Aquí tienes más información sobre cómo utilizarlos:

Ajo: El ajo es conocido por sus propiedades antimicrobianas y estimulantes del sistema inmunológico. Puedes consumirlo de las siguientes formas:

Ajo crudo: Pela y machaca un diente de ajo fresco. Puedes mezclarlo con miel para mejorar su sabor y tomarlo directamente o añadirlo a alimentos como sopas o guisos.

Infusión de ajo: Hierve varios dientes de ajo en agua durante unos minutos. Cuela el líquido y bébelo como una infusión.

Suplementos de ajo: También puedes encontrar suplementos de ajo en forma de cápsulas o tabletas en tiendas de productos naturales. Sigue las instrucciones del fabricante para su uso.

Recuerda que el ajo puede tener un sabor y olor fuertes, por lo que algunas personas pueden encontrarlo desagradable. Si experimentas malestar estomacal o cualquier reacción adversa, deja de consumirlo y consulta a un profesional de la salud.

Agua: Mantenerse hidratado es esencial durante un resfriado, ya que ayuda a aliviar la congestión y mantener las vías respiratorias húmedas. Aquí tienes algunas recomendaciones:

Bebe agua regularmente a lo largo del día para mantener tu cuerpo hidratado. También puedes consumir caldos calientes, infusiones de hierbas o tés para aliviar los síntomas del resfriado.

Agua con sal: Mezcla media cucharadita de sal en un vaso de agua tibia y realiza gárgaras varias veces al día. Esto puede ayudar a aliviar el dolor de garganta y reducir la inflamación.

Humidificador: Utiliza un humidificador en tu habitación para mantener el ambiente húmedo. Esto puede ayudar a aliviar la congestión nasal y la sequedad en las vías respiratorias.

Recuerda que estos remedios naturales pueden ser útiles para aliviar los síntomas del resfriado, pero no reemplazan el tratamiento médico adecuado. Si los síntomas persisten o empeoran, es importante consultar a un profesional de la salud.