«Las noticias falsas amenazan nuestra democracia», advirtieron académicos de la comunicación.
Algunos ven a Lilia Lemoine como una "cheta" que se caga en todo. Yo veo una pobre mina que grita "ME cago en la educación gratuita A LA QUE VOS PODES ASISTIR", muy resentida porq JAMÁS PISARÁ UNA UNIVERSIDAD por sus evidentes LIMITACIONES, que de maquilladora y cosplayer no pasa pic.twitter.com/jDUX8NXW3x
— #BloKeoBoludxs (@BloKeoBoludos) November 8, 2023
El uso masivo de la mentira es un fenómeno preocupante que puede tener graves consecuencias en la sociedad y la política. La mentira, en sí misma, es la declaración de información falsa con la intención de engañar o manipular a otros. Cuando se vuelve masiva o generalizada, puede socavar la confianza pública, erosionar la integridad de las instituciones y dificultar la toma de decisiones informadas.
Existen varias razones por las cuales el uso masivo de la mentira puede ser perjudicial:
Erosiona la confianza: Cuando la gente se da cuenta de que se les está mintiendo constantemente, pierden la confianza en las fuentes de información y en las instituciones. Esto puede debilitar la cohesión social y dificultar la cooperación.
Dificulta la toma de decisiones informadas: Las mentiras pueden distorsionar la percepción de la realidad y dificultar la toma de decisiones basadas en información precisa. Esto puede tener un impacto negativo en la política, la economía y otros aspectos de la sociedad.
Debilita la democracia: En un sistema democrático, la honestidad y la transparencia son fundamentales para el funcionamiento adecuado. El uso masivo de la mentira puede socavar la legitimidad de las elecciones y minar la confianza en el gobierno.
Promueve la polarización: Las mentiras pueden utilizarse para avivar la polarización y el odio, ya que pueden ser empleadas para demonizar a grupos o individuos, sembrar discordia y dividir a la sociedad.
Perjudica la cooperación internacional: En la arena internacional, el uso masivo de la mentira puede socavar la diplomacia y la cooperación entre países, lo que puede tener graves consecuencias en la paz y la seguridad global.
Es importante promover la honestidad, la transparencia y la responsabilidad en la sociedad y en la política para contrarrestar el uso masivo de la mentira. La educación cívica, la promoción de la ética y la rendición de cuentas son herramientas clave para abordar este problema y construir una sociedad basada en la confianza y la verdad. También es fundamental que los medios de comunicación y las instituciones públicas desempeñen un papel activo en la verificación de los hechos y la divulgación de información precisa.
Que grande Giaco, no le hicieron pisar nunca el palito y hablo de lo importante, siendo congruente con los principios de la ética liberal. La democracia representativa y el Estado Republicano implica pensamiento mágico y/o religioso. https://t.co/1CsXQpR73m
— Sharbel Dapás (@SharbelDapas) November 8, 2023
Asociaciones que nuclean a las carreras de comunicación y periodismo de universidades públicas y privadas de todo el país advirtieron hoy sobre las campañas de desinformación respecto a «irregularidades electorales y fraudes inexistentes», alertaron sobre «el uso masivo de la mentira» a través de las noticias falsas en medio de la campaña electoral y aseguraron que constituyen una «amenaza» a la democracia, de cara al balotaje del 19 de noviembre.
Así lo afirmaron en un documento titulado «Las noticias falsas amenazan nuestra democracia» los académicos nucleados en la Red de Carreras de Comunicación de la Argentina (RedCom) y la Federación Argentina de Carreras de Comunicación Social (Fadeccos).
El pronunciamiento de los académicos se conoce en momentos en que el propio candidato presidencial de La Libertad Avanza, Javier Milei, agita con sus declaraciones el fantasma de un supuesto «fraude» electoral.
Anoche, en una entrevista con el periodista Jaime Bayly, Milei puso en duda los resultados de las elecciones generales del 22 de octubre, al asegurar que “hubo irregularidades” que favorecieron al candidato de Unión por la Patria, Sergio Massa, y lo atribuyó a que “la Justicia electoral está muy influenciada por el poder político”.
«Las campañas de desinformación sobre irregularidades electorales y fraudes inexistentes no hacen más que sembrar dudas sobre un sistema que funciona bien y azuzar la desconfianza en la democracia», remarcaron los académicos en el texto.
Añadieron que «la creación de climas de sospecha sobre la transparencia del sistema electoral bastardea de antemano la legitimidad de la decisión popular y abre la puerta a escenarios con incalculables consecuencias».
«En el contexto de una decisión electoral, el uso masivo de la mentira puede cumplir un rol crucial intentando manipular la voluntad popular», aseguraron y agregaron que la «proliferación de fake news» es «una práctica perniciosa que avasalla el derecho a la comunicación de la ciudadanía».
«A punto de celebrar 40 años de continuidad democrática en nuestra Patria exhortamos a los candidatos, a sus equipos de campaña y a los medios de comunicación masiva a que honren esta gesta del pueblo argentino impidiendo el uso de las noticias falsas que no hacen otra cosa que deslegitimar la vigencia de la democracia», dice el comunicado.
Además, dijeron que estas prácticas son «irresponsables y peligrosas» y que ya se han visto «en otros países poniendo en riesgo el orden público».
Asimismo, recordaron el Compromiso Ético Digital asumido por todas las fuerzas políticas, plataformas digitales y medios de comunicación ante la Justicia Electoral Nacional.
«Las deudas del sistema democrático se resuelven con mayor transparencia, con más diálogo y sin pretensiones de exterminar adversarios políticos o electorales, pero sobre todo con más educación. Y ello sólo es posible con Ciencias Sociales, con más y mejor educación pública y con un respaldo irrenunciable al derecho a una educación superior inclusiva, gratuita, pública, laica y de excelencia», concluyeron.
Los mentirosos utilizan una variedad de tácticas para ocultar la verdad o engañar a los demás. A continuación, se presentan algunas de las tácticas comunes que los mentirosos pueden emplear:
Negación directa: En esta táctica, el mentiroso simplemente niega haber hecho algo incorrecto o dicho algo falso, incluso cuando hay pruebas claras de lo contrario.
Desviación: Los mentirosos pueden intentar cambiar de tema o desviar la atención lejos de la verdad al hablar de otro asunto o hacer preguntas irrelevantes.
Omisión de información: En lugar de decir una mentira directa, los mentirosos pueden optar por omitir información relevante que contradiga su versión de los hechos.
Engaño por omisión: En esta táctica, los mentirosos pueden decir la verdad de manera selectiva, destacando solo ciertos aspectos de la historia para dar una impresión engañosa.
Evitar el contacto visual: Algunas personas que mienten pueden evitar el contacto visual, ya que sienten que esto podría revelar su engaño. Sin embargo, esta táctica no es una garantía de que alguien esté mintiendo, ya que puede haber otras razones para evitar el contacto visual.
Uso de lenguaje vago: Los mentirosos pueden emplear lenguaje ambiguo o evasivo para no comprometerse con una historia particular. Esto les permite cambiar su historia más fácilmente si son desafiados.
Crear coartadas falsas: Los mentirosos pueden inventar coartadas o explicaciones falsas para justificar sus acciones o para encubrir la verdad.
Hacer afirmaciones exageradas o excesivamente detalladas: Algunas personas tienden a mentir de manera exagerada, proporcionando detalles innecesarios o inverosímiles en un esfuerzo por hacer que su historia parezca más creíble.
Usar el sarcasmo o el humor: Los mentirosos a veces emplean el sarcasmo o el humor como una forma de minimizar lo que están diciendo o para hacer que parezca que están bromeando.
Volverse a la defensiva: Cuando se enfrenta a la posibilidad de que se les descubra mintiendo, los mentirosos pueden volverse a la defensiva, negar rotundamente las acusaciones y acusar a otros de ser injustos o crueles.
Es importante recordar que no todas las personas que utilicen estas tácticas son necesariamente mentirosas, ya que pueden haber otras explicaciones para su comportamiento. Sin embargo, estas tácticas pueden ser indicadores de engaño, y es importante tener en cuenta el contexto y las pruebas adicionales al evaluar si alguien está mintiendo. La detección de la mentira puede ser complicada, y es recomendable confiar en métodos más sólidos, como la verificación de hechos y la comunicación abierta, para determinar la verdad.