Desde Plaza de Mayo llamaron a un paro general.

El titular de la CTA opositora, Pablo Micheli, anunció esta tarde en la Plaza de Mayo que acordó con su par de la CGT Azopardo, Hugo Moyano, realizar un «paro nacional» antes de fin de año y calificó de «alcahuetes del Gobierno» a los dirigentes de la central obrera oficialista que conduce el metalúrgico Antonio Caló.

«Moyano me dijo esta mañana por teléfono que no va a terminar este año sin que hagamos un paro nacional para que no se mueva ni una sola pluma en la Argentina», sostuvo Micheli al cerrar la jornada de paro y movilización de la CTA, que tuvo el acompañamiento del gremio de Camioneros.

Por otra parte, Micheli tildó de «alcahuetes» a los líderes de la CGT oficialista que ayer se reunieron con la presidenta Cristina Kirchner y los burló al señalar que «a pesa de que tanto le han chupado las medias no les dieron ni una limosna, absolutamente nada».

«Ahora se llenan la boca diciendo que hay cinco centrales sindicales. No. Hay dos, la CGT y la CTA, los otros son alcahuetes del Gobierno y no tiene nada que ver con los trabajadores», apuntó.

Por la CGT de Moyano participaron los sindicalistas Julio Piumato y Juan Carlos Schmidt, quien sostuvo que «hay muchos sordos en el Gobierno nacional» y advirtió: «Vamos a seguir llevando adelante un programa de acción para recuperar la verdadera democracia».

Pablo Micheli, también resaltó que «los trabajadores no están» entre «los amigos» de la presidenta Cristina Kirchner.

«La representación de los trabajadores no es la que recibió ayer (la CGT que lidera Antonio Caló), sino que está en otro lugar. No está a donde van los amigos de la Presidenta», recalcó Micheli, que contó con el respaldo de los camioneros de Hugo Moyano.

Las columnas empezaron a llegar a las inmediaciones de la Casa de Gobierno luego de una mañana con cortes en distintos puntos de la Capital, ya que los manifestantes bloquearon la Autopista Buenos Aires-La Plata, en la subida en la capital provincial; el Acceso Oeste (a la altura de Morón), y el Puente Pueyrredón.

El titular de la CTA opositora cuestionó los índices de inflación y la nueva ley de riesgos de trabajo que impulsa el oficialismo.

«Esperemos que la Presidenta no salga no ninguna grosería (después de la marcha)», dijo Micheli, que también cosechó el respaldo de los trabajadores de la isla Demarchi, quienes resistenla construcción del Polo Audiovisual que impulsa el Gobierno enese espacio.

Los 90
“Habría que preguntarle a 6-7-8 que piensa de que la Presidente se reúna con Cavalieri, Lescano y todos los traidores de los noventa”, señaló Pablo Moyano.
Lo hizo minutos después de bajar del escenario montado en Plaza de Mayo, adonde asistió para participar de la movilización de la CTA de Pablo Micheli y varias organizaciones políticas y sociales.
El hijo de Hugo Moyano dijo haber sentido “asco” al ver la foto de la mandataria con los sindicalistas agrupados en la CGT de Antonio Caló, y agregó que lo mismo “habrán sentido también los miles de trabajadores que resistieron en los noventa sobre el hecho de que la Presidenta del movimiento revolucionario, nacional y popular haya recibido a los que entregaron todo mientras resistíamos en la calle”.
“Vimos a la Presidenta riéndose a los abrazos con West Ocampo, Cavalieri, Lescano y todos los personajes que entregaron las leyes de los trabajadores. Había que preguntar a Kunkel, Depetri y todos esos que se hacen los revolucionarios a ver que piensan de esa foto”, concluyó.