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Vende humo: El arte internacional no existe más.

Cuando los coleccionistas verdaderos corruptos de arte, curadoras verdaderas vende humo «de la salada» salidas de las cátedras del chamu teórico universitario, galeristas verdaderas farsantes fenicias, y que generalmente fueron sus maridos, que al no aguantarlas más y en vez de comprarles una negocio de venta de bombachas y corpiños les pusieron atodo trapo «venta de arte», y entre ellos se exponen finalmente son el motivo de las exposiciones y no los artistas, los resultados son catastróficos.

Son como la obra de Jimena Berón, «puta», que al no saber cantar ni bailar, muestra la tanga, no son Marcel Duchamp, son solo vendedores de humo. Ó casos horribles de artístas plásticos que para mostrar en un Museo hacen petes varias veces y en reiteradas ocasiones… para exponer, por eso se denomina «venta de humo» en el arte está para venderles obras a los bobos.

La lamentable crítica de arte Avelina Lésper ha sido acusada de destruir intencionadamente una obra del artista mexicano Gabriel Rico, el pasado sábado, en la exposición Zona Maco de la galería OMR, en Ciudad de México. La creación, titulada ‘Nimble and sinister trick (To be preserved with put scandal and corruption)’, estaba valorada en 20.000 dólares.

Una de las primeras personas en denunciar a Lésper fue el director del Museo Soumaya, y testigo del incidente, Alfonso Miranda, quien a través de su cuenta de Twitter dijo que «la pseudo y autoproclamada crítica de arte Avelina Lésper» rompió la obra y «ni siquiera se disculpó y huyó».

En Buenos Aires, no nos quedamos detrás, desagradables coleccionistas, Directoras de Museos de Buenos Aires, Curadoras comisarias y críticos son el hazme reir de la prensa y el público.

Este es también el caso de una muestra de 300 «porquerias» que reúne en el Centro Cultural Borges (CCB) fotografías, pinturas, collages, dibujos, esculturas, objetos y tapices de seudo artistas como Nicola Costantino (recordar la bienal en la que fué casi expulsada), Liliana Porter (que le roba los juguetes a sus sobrinos), da cuenta de la masturbación colectiva y del eclecticismo inmoral del arte contemporáneo argentino. La línea «pro Miami» que dejó Glusberg Jorge, dejó junto a la dictadura militar un desastre que los políticos no dimensionan. Argentinapodría vender arte al mundo y no solo no va a poder, si no que nunca lo va a poder generar ya que han destruido desde 1976 todo a su paso.

Todo esto pone de relieve el poco valor del coleccionista de Esteban Tedesco, un médico cirujano, que le fue bastante mal como ciruja, y que muestra su desastre de más de 1.200 piezas de «creadores», paralograr reahacer alguna nariz o lograr que una de las tantas toroes que van a una expoición se haga las tetas. Una Valoración excesiva de la propia personalidad que llevó a esta seudo persona a creerse el centro de todas las preocupaciones y atenciones en lo que queda de un Centro Cultural en Argentina denominado Centro Cultural Borges (CCB). Pobre Luis.

Hay otros casos donde un vendedor de ropa blanca, (por la coca) se convirtió en un poderoso hotelero en Miami en un chasquido de dedos. O Un Juez de Cámara penal Argentino que firmá las condenas a perpetua y obras de dudosa reputación se transformaron en verdaderos vende humo. Como Lanata y su lamentable colección de arte.

El arte son estos huevos que se chocan y se dicen «hola amigo».

Se trata de una selección de de «venta de humo», o de «venta de jardín» de la colección de Esteban Tedesco que reune unas «300 cosas» que «Él» pago caras y quiere engrupir al resto diciendo que son «expresiones artísticas» que se presentan bajo el título «Secretos compartidos», segunda edición, curadas por verdaderos vende humos por correspondencia como Virginia Fabri y y el vendedor de humos a domicilio y por Internet de Eduardo Stupía.

Cuando el centro de la escena son los «Salieris de charly», los resultados son desastrozos.

Recomendamos no ir a verla. Vallan a trabajar caraduras. Frasantes.


Le pueden robar a los niños. No a nosotros.