Niebla en Buenos Aires

Una densa niebla cubrió el cielo porteño

El cielo parcialmente nublado de la jornada se cubrió de una densa niebla durante la tarde de hoy en distintos puntos de la Ciudad de Buenos Aires y el Conurbano bonaerense, aunque sin dificultar la visibilidad para el tránsito vehicular y la operatoria de los aeropuertos metropolitano Jorge Newbery e internacional de Ezeiza.

Las zonas de Retiro, Puerto Madero y La Boca fueron los barrios porteños donde la bruma generó un atardecer, con neblina instalada en calles y avenidas. También varias localidades del noreste y sureste del Conurbano se vieron alcanzadas por una reducción de la visibilidad, fundamentalmente, en la autopista Buenos Aires-La Plata.

Con un pronóstico de algunas lluvias para la noche de este sábado y un domingo nublado, con temperaturas osciladas como una mínima de 9 grados y una máxima de 18, el Servicio Meteorológico Nacional no da cuenta sobre problemas de visibilidad a causa de la niebla, estimando que se mantendrá en los 10 kilómetros.

Por otra parte, varios usuarios de redes sociales compartieron imágenes de la densa niebla que cubrió el cielo porteño y en algunos casos, al margen del fenómeno meteorológico, atribuyeron la bruma del atardecer a la presencia de humo.

La niebla

La niebla es un fenómeno meteorológico que consiste en la suspensión de pequeñas gotas de agua en el aire, cercanas al suelo, lo que reduce la visibilidad. Se forma cuando el aire frío y húmedo se encuentra con una superficie más cálida, enfriándose y saturándose de humedad. La niebla puede ocurrir en diferentes condiciones, como cerca de cuerpos de agua, en valles o áreas bajas, o después de lluvias intensas.

La niebla puede tener un impacto significativo en la conducción y la navegación, ya que reduce la visibilidad y dificulta la percepción de objetos y obstáculos. También puede crear una atmósfera misteriosa y evocadora, a menudo utilizada en el cine y la literatura para crear un ambiente intrigante o melancólico.

Existen diferentes tipos de niebla, como la niebla de radiación, que se forma por la pérdida de calor en la superficie durante la noche; la niebla de advección, que se produce cuando el aire cálido y húmedo se desplaza sobre una superficie más fría; y la niebla orográfica, que se forma cuando el aire húmedo se eleva sobre terreno montañoso.

La niebla es un fenómeno natural fascinante que puede crear paisajes atmosféricos y brindar una experiencia visual y sensorial única. También puede ser motivo de precaución en situaciones donde la visibilidad se vea afectada, como en el tráfico o en actividades al aire libre.

La niebla puede representar diversos peligros debido a su impacto en la visibilidad y las condiciones de conducción. Algunos de los riesgos asociados con la niebla incluyen:

Reducción de la visibilidad: La principal preocupación con la niebla es la disminución drástica de la visibilidad. Puede ser difícil distinguir los objetos, los vehículos u otros obstáculos en la carretera, lo que aumenta el riesgo de colisiones.

Mayor distancia de frenado: La niebla puede afectar la capacidad de respuesta de los conductores y prolongar la distancia de frenado. Esto puede hacer que sea más difícil detenerse a tiempo para evitar una colisión con un vehículo que se encuentra adelante.

Condiciones de conducción resbaladizas: La niebla puede hacer que las carreteras estén húmedas, lo que puede provocar un aumento en el deslizamiento y la falta de tracción de los neumáticos. Esto puede hacer que el control del vehículo sea más difícil y aumentar el riesgo de accidentes.

Cambios en la percepción de velocidad: La niebla puede distorsionar la percepción de velocidad. Los conductores pueden tener la sensación de que están conduciendo a una velocidad más lenta de la que realmente están, lo que puede llevar a maniobras incorrectas o a una conducción demasiado rápida para las condiciones reales.

Mayor riesgo de colisiones en cadena: Debido a la reducción de la visibilidad y la falta de tiempo de reacción, la niebla puede aumentar el riesgo de colisiones en cadena. Si un conductor no puede ver los vehículos que se encuentran detenidos o reduciendo la velocidad por delante, es más probable que ocurran accidentes múltiples.

Desorientación y pérdida de referencia: La niebla puede causar desorientación y pérdida de referencia espacial, especialmente en áreas desconocidas. Esto puede dificultar la navegación y aumentar la posibilidad de perderse o entrar en zonas peligrosas.

Ante condiciones de niebla, es importante tomar precauciones adicionales al conducir, como reducir la velocidad, aumentar la distancia de seguimiento, utilizar las luces de niebla (si están disponibles) y mantener una mayor atención y concentración en la carretera. En algunos casos extremos de niebla densa, puede ser recomendable detenerse en un lugar seguro hasta que las condiciones mejoren.