En Mayo, La Pescadorita cumple su segundo aniversario: dos años de pasion maritima real, en donde el agua y la playa se adivinan en el aire. Con insumos de mar que parecen recien sacados de un oceano adyacente a la cocina, los platos de esta carta festiva traen el sabor de las vacaciones, del sol y la sal en la piel. Pero como la escenografia es una protagonista mas, hay caracoles, estrellas de mar, sillas de mimbre celestes, piso de venecita y un mural con sirena rubia incluida, hecho por el artista Pablo Cortes.
¿Que comer para recrear la fantasia completa de una escapada en plena ciudad? Rabas, por supuesto. Pero crocantes, sequitas, con gusto real. Y cornalitos, langostinos, chipirones.
Para seguir, Parrillada de Pescados y Mariscos (pensada para compartir, como casi todos los platos), o el poco habitual Tataki de Atun Rojo. Y sino, con acento español, Paella, un autentico canto al manjar iberico mas popular, perfecta, abundante, en el punto justo. ¿Pescado al plato? Salmon crocante con citricos y salsa tartara; Lenguado capresse en hojaldre con crema de limon. Es especialmente importante la atencion de los camareros, que a la manera de guias especializados, sugieren, incitan, aparecen veloces o se retiran en el instante justo, segun el clima emocional de cada mesa.
La propuesta de vinos, diseñada por el consagrado sommelier Aldo Graziani, es rica y variada, apta para todas las ocasiones. Y sino, siguiendo la linea vacacional, hay cervezas heladas.
El postre trae la misma abundancia que el resto de la carta: Texturas de chocolate, Creme brulee de peras y pistachos, Tarta de limon caramelizada y crema inglesa, Copa de merengue con frutillas y helado.
La Pescadorita, en su segundo aniversario, cumplio su objetivo: proponer en Buenos Aires el pescado como comida habitual y accesible, en un formato que remite a la pausa veraniega, pero en plena ciudad y apta para todas las epocas del año.
En Humboldt 1905/ 4773 0070/ 4776 5653
Gasto promedio: $180
