Pasaje Malasia

Pasaje Malasia del Barrio de Palermo. Viviendas de millonarios

Pasaje Malasia del Barrio de Palermo. Viviendas de millonarios.

Pasaje Malasia es un pequeño y pintoresco pasaje ubicado en el barrio de Palermo, cerca de Belgrano, en la ciudad de Buenos Aires, Argentina. Se encuentra entre las calles Sucre y José Hernández, y es conocido por su arquitectura y su ambiente de casas tranquilas, vivienda de millonarios y bohemio.

El pasaje Malasia delimita el barrio de Palermo con el de Belgrano y es una de las calles más viejas de Buenos Aires. Está compuesto de edificios y casas que llegan a ocupar hasta una cuadra y media, con cuidadores durante el día y la noche.

Definido por expertos como el «más europeo» de la Ciudad, el ex Arribeños cuenta además con una de las fachadas porteñas únicas: la casa del arquitecto Estanislao Pirovano con influencia anglosajona. Es blanca, tiene balcón de estilo gótico y columnas.

El pasaje cuenta con un conjunto de casas de estilo colonial español, que se destacan por sus fachadas de colores y sus detalles decorativos. Muchas de estas casas han sido restauradas y conservan sus características originales, lo que les da un aire antiguo y nostálgico.

TIP En el pasaje Malasia se pueden encontrar algunas casas de estilo ingles.

En resumen, Pasaje Malasia es un rincón encantador de Buenos Aires que vale la pena visitar para experimentar la vida tranquila y bohemia de este barrio histórico.

Los pasajes de una sola cuadra en Buenos Aires son callejones que se encuentran en distintos barrios de la ciudad y que se caracterizan por su corta longitud y su estrechez. Estas calles suelen tener una sola entrada y salida y pueden tener diferentes nombres, como pasajes, callejones o cortadas.

Los pasajes de Buenos Aires tienen una historia muy interesante. Muchos de ellos se originaron en la época colonial, cuando la ciudad estaba siendo construida. En aquel entonces, las casas y edificios se construían muy juntos para ahorrar espacio y aprovechar mejor la tierra disponible. Como resultado, se crearon pasajes y callejones estrechos entre los edificios, que permitían el acceso a las casas y a los patios interiores.

Con el tiempo, los pasajes se convirtieron en lugares de encuentro y de vida social para los vecinos de la zona. En muchos casos, se desarrollaron pequeñas comunidades que se mantenían apartadas del bullicio de la ciudad. Los pasajes también fueron el hogar de algunos personajes históricos, como escritores y artistas que encontraron inspiración en la atmósfera bohemia de estas calles estrechas.

Hoy en día, muchos de estos pasajes se han conservado y se han convertido en atracciones turísticas populares. Los visitantes pueden caminar por estas pequeñas calles y disfrutar de la arquitectura y la historia que encierran. Algunos de los pasajes más famosos de Buenos Aires son el Pasaje Santa Rosa en San Telmo, el Pasaje Rivarola en Recoleta y el ya mencionado Pasaje Malasia en Palermo.