El Chagas congénito es una enfermedad parasitaria causada por el parásito Trypanosoma cruzi que se transmite de la madre infectada al feto durante el embarazo. Esta enfermedad es común en América Latina, especialmente en zonas rurales donde el vector transmisor, la chinche besucona, se encuentra con mayor frecuencia.
Los bebés que nacen con Chagas congénito pueden experimentar una amplia gama de síntomas, incluyendo fiebre, aumento del tamaño del hígado y bazo, erupción cutánea, inflamación de los ganglios linfáticos, anemia y problemas cardíacos. Los síntomas pueden aparecer al nacer o pueden tardar meses o incluso años en desarrollarse.
El diagnóstico se realiza mediante la detección de anticuerpos contra T. cruzi en la sangre del bebé. El tratamiento para el Chagas congénito incluye medicamentos antiparasitarios, pero es más efectivo si se administra temprano en la vida del bebé.
La prevención del Chagas congénito implica la detección temprana y el tratamiento de las mujeres embarazadas infectadas. También es importante controlar la población de chinches besuconas en las áreas donde se encuentra el parásito transmisor.
El insecto que transmite la enfermedad de Chagas se llama «Triatoma infestans», pero es comúnmente conocido como «chinche besucona» o «vinchuca» en algunos países de América Latina.
La chinche besucona se encuentra principalmente en zonas rurales y suburbanas de América Latina, y suele habitar en casas precarias construidas con materiales de baja calidad. Esta especie de insecto se alimenta de la sangre de animales y humanos, y mientras se alimenta, puede transmitir el parásito Trypanosoma cruzi a través de sus heces, que contienen el parásito.
Cuando la persona se rasca el sitio de la picadura, las heces del insecto se frotan en la piel y pueden ingresar al cuerpo a través de la piel rota o las membranas mucosas. Una vez dentro del cuerpo, el parásito puede causar la enfermedad de Chagas, que puede ser potencialmente mortal si no se trata.
La chinche besucona, también conocida como vinchuca, es un insecto que puede transmitir la enfermedad de Chagas a los seres humanos. Esta enfermedad puede ser grave y, en algunos casos, mortal si no se trata a tiempo. Es por eso que es importante tomar medidas para evitar la exposición a este insecto y mantener su hogar libre de chinches besuconas.
Algunos peligros asociados con las chinches besuconas incluyen:
Transmisión de la enfermedad de Chagas: Las chinches besuconas pueden transmitir el parásito Trypanosoma cruzi a través de sus heces. Si la persona se rasca la picadura, las heces pueden ingresar al cuerpo a través de la piel rota o las membranas mucosas.
Reacciones alérgicas: Las picaduras de chinches besuconas pueden causar una reacción alérgica en algunas personas. Los síntomas pueden incluir enrojecimiento, hinchazón y picazón en el sitio de la picadura.
Para limpiar la zona y prevenir la presencia de chinches besuconas, aquí te dejamos algunos consejos:
Mantén tu hogar limpio y ordenado: Las chinches besuconas tienden a habitar en áreas desordenadas y sucias. Asegúrate de limpiar regularmente y mantener tu hogar libre de desechos.
Sella las grietas y agujeros: Las chinches besuconas pueden entrar a tu hogar a través de grietas y agujeros en las paredes y techos. Sella todas las grietas y agujeros para evitar que entren.
Utiliza insecticidas: Los insecticidas pueden ser efectivos para controlar la población de chinches besuconas. Asegúrate de seguir las instrucciones del fabricante al usar cualquier producto químico.
Usa mosquiteros: Utiliza mosquiteros en las ventanas y puertas para evitar que las chinches besuconas entren a tu hogar.
Lava la ropa de cama y la ropa regularmente: Lava la ropa de cama y la ropa regularmente con agua caliente para matar cualquier chinche besucona que pueda estar presente.
En caso de encontrar chinches besuconas en tu hogar, es recomendable contactar a un experto en control de plagas para que te ayude a eliminarlos de manera efectiva y segura.
Autoridades sanitarias de la región debaten estrategias contra el Chagas congénito
La III Reunión del Consejo Intergubernamental de la Iniciativa Iberoamericana sobre Chagas Congénito con la participación de autoridades sanitarias de Argentina, Brasil, Colombia, España, Paraguay, Guatemala, Honduras y El Salvador comenzó hoy en el Ministerio de Salud para debatir y trabajar sobre estrategias contra la transmisión de esa enfermedad a hijas e hijos durante la gestación, se informó.
Bajo el lema “Ningún Bebé con Chagas: el camino hacia nuevas generaciones libres de Chagas”, durante el encuentro, que se completará este martes, los países definirán los territorios donde cada uno implementará intervenciones piloto, y se establecerán los respectivos indicadores y metas para demostrar la posibilidad de interrumpir la transmisión materno infantil de la enfermedad de Chagas.
La apertura de la Reunión Técnica contó con la presencia de la ministra de Salud, Carla Vizzotti, quien destacó que “esta Iniciativa es una muestra de la sinergia que se puede generar para que esta enfermedad desatendida tenga atención”.
“Ningún Bebé con Chagas es una prioridad”, dijo, y subrayó que “las herramientas, la tecnología y los tratamientos están a nuestra disposición y nuestro compromiso es que llegue a quienes deban recibir esta atención”.
Por su parte, Eva Jané Llopis, Representante en Argentina de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) hizo hincapié en “la importancia de esta reunión, cuyo principal objetivo es encontrar la manera de abordar la enfermedad de Chagas transmitida por vía vertical”.
Pedro Albajar Viñas, Responsable del Programa de Control de la Enfermedad de Chagas en el Departamento de Control de Enfermedades Tropicales Desatendidas de la Organización Mundial de la Salud (OMS), habló de los avances logrados en los últimos años respecto a la enfermedad y remarcó que “no hay excusas para no tratar, para no interrumpir la transmisión de Chagas congénito”.
Finalmente, Marcelo Abril, secretario técnico de la Iniciativa Ningún Bebé con Chagas y Director Ejecutivo de la Fundación Mundo Sano que participa de la iniciativa y que fue designada Unidad Técnica, afirmó que este encuentro “consolida los compromisos asumidos en la Reunión llevada a cabo en 2022 en Bogotá, sentando las bases para una pronta y efectiva etapa de implementación”.
La enfermedad de Chagas es la enfermedad desatendida con mayor carga de salud en Latinoamérica.
Es endémica en 21 países de América y afecta de 6 a 8 millones de personas en el mundo, de las cuales 1,2 millones son mujeres en edad fértil.
Actualmente, dentro y fuera de Latinoamérica, la transmisión de madre a hijo es el principal modo de transmisión, se estima que 9.000 bebés heredan la enfermedad de Chagas de su madre de los cuales, la mayoría de los afectados, no acceden al diagnóstico y tratamiento a tiempo para evitar las consecuencias en la salud de las personas.
En 2021, en la XXVII Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno celebrada en Andorra se aprobó la «Iniciativa Iberoamericana sobre Chagas Congénito: Ningún bebé con Chagas», con el objetivo de contribuir a la eliminación de la transmisión materno infantil de la enfermedad de Chagas desde un abordaje multidimensional.
Entre los objetivos de la iniciativa está el fortalecimiento de los sistemas de salud en materia de prevención, el diagnóstico oportuno, el tratamiento y seguimiento de la enfermedad de Chagas, con énfasis en las mujeres en edad fértil, embarazadas y recién nacidos.
La iniciativa pertenece a los países iberoamericanos que adhieren a ella.
